La Paz Policial

Exalcalde y expresidente municipal condenados a 30 años de cárcel por asesinato de concejala en Ancoraimes

Detalle de la fotografía en un teléfono de la concejala Juana Quispe durante una manifestación para exigir justicia por su asesinato en 2012./EFE
El Tribunal Cuarto de Sentencia de La Paz ha dictado una sentencia de 30 años de cárcel para el exalcalde Félix Huanca y el expresidente del Consejo Municipal Pastor Cutile, declarados culpables del asesinato de la concejala Juana Quispe.


El Tribunal Cuarto de Sentencia de La Paz ha dictado una sentencia de 30 años de cárcel para el exalcalde del municipio de Ancoraimes, Félix Huanca, y para el expresidente del Consejo Municipal, Pastor Cutile. Ambos han sido declarados culpables del asesinato de la concejala Juana Quispe.

Otras condenas por complicidad

Después de casi 12 años, finalmente se ha hecho justicia en este caso. Además de las penas impuestas a Huanca y Cutile, la exsecretaria del Consejo, Basilia Ramos, recibió una condena de 15 años de reclusión, mientras que Exalta Arismendi, quien estuvo presente durante el crimen y encubrió los hechos ocurridos el 12 de marzo del 2012, fue sentenciada a 2 años de cárcel.

Lugares donde cumplirán condena

Huanca y Cutile cumplirán su condena en el penal de San Pedro en la ciudad de La Paz. Por su parte, Ramos será trasladada al Centro de Orientación Femenina (COF) en Obrajes. En cuanto a Arismendi, se espera que se le otorgue «perdón judicial» y no sea enviada a prisión.

Emoción por la sentencia

La abogada de la familia Quispe, Valquiria Lira, expresó la emoción que sienten las hermanas de la víctima ante esta sentencia: «Son 12 años luchando contra el poder que tenían los acusados y sus contactos políticos».

Un largo proceso judicial

El juicio comenzó en febrero del año 2023 y se llevaron a cabo al menos 35 audiencias hasta llegar a esta etapa final. Se espera que el próximo 9 de enero se dé a conocer la fundamentación y lectura completa de la sentencia.

Trayectoria política truncada

Juana Quispe era reconocida por su liderazgo en su tierra natal, Llojllata Laymini, un cantón ubicado en el municipio de Ancoraimes. Su trayectoria política la llevó a convertirse en concejala electa, pero enfrentó obstáculos y hostigamiento por parte de Huanca y sus excolegas, quienes le impidieron ejercer su cargo y finalmente la obligaron a renunciar bajo presiones hasta que fue asesinada.

Los detalles del crimen

Las investigaciones realizadas el 12 de marzo del 2012 revelaron que Juana Quispe aceptó una invitación para asistir a una movilización en La Paz junto a Huanca y luego almorzar juntos. Sin embargo, no se supo más de ella hasta el día siguiente, cuando encontraron su cuerpo cerca de un río con signos evidentes de estrangulamiento.

Impacto histórico del caso

Este caso se ha convertido en un hito histórico debido a que impulsó posteriormente la promulgación de la Ley 243 Contra el Acoso y la Violencia Política hacia las Mujeres.


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