El arzobispo de Santa Cruz, Sergio Gualberti, durante la misa celebrada esta jornada en la Catedral, invitó a la población a acercarse a Dios y alimentarse del “pan de vida” para no desfallecer en los momentos duros que se presentan en el país.
El monseñor se refirió en especial a este tiempo de pandemia en Bolivia por el Covid-19, el cual está cobrando varias vidas, y por los incendios forestales que afectan la biodiversidad.
Gualberti indicó durante su homilía que el camino de fe en el Señor es “largo y arduo” y no basta solo esfuerzo, hace falta pedir con humildad a Dios.
El arzobispo de Santa Cruz explicó que “los panes de vida” son la señal de la cercanía de Dios que proporciona las fuerzas y energía para levantarse de una situación de frustración. También indicó que ayuda a renovar las esperanzas del pueblo para continuar cualquier lucha que se presente.
“En nuestra vida pasamos por tantas pruebas, a veces el horizonte se hace nebuloso, nos sentimos solos, abandonados por Dios, sin esperanza y tentados de dejarlo todo. Pero, precisamente en esos momentos tenemos que recordarnos de la invitación de Jesús, levantarnos y alimentarnos con el Pan de Vida”, fue parte de la reflexión del religioso.
Asimismo, invitó a los cristianos a cumplir la Eucaristía, que es el pan de vida y que está al alcance de todos.
“Demasiados católicos no se acercan a comulgar, privándose así de la gracia y desconociendo este gran don del amor de Dios. Evitemos que Jesús haya ofrecido en vano su cuerpo y su sangre como Pan de Vida; por el contrario, acerquémonos a la mesa del altar con frecuencia para alimentarnos de Él y tener así la fuerza de seguirlo”, finalizó.
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