Solidarizarse con los familiares de las víctimas y heridos de Senkata y Sacaba de 2019 así como lo hace por la situación que atraviesa la expresidente Jeanine Añez, fue el pedido que hizo este martes el ministro de Defensa, Edmundo Novillo a la Iglesia Católica.
La autoridad recordó que existen otras personas que necesitan también de su atención como las personas que atravesaron la crisis de 2019. Además admitió entender la expresión democrática de los obispos de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) por expresar su solidaridad, de manera general, con las personas privadas de libertad.
“Con el mayor respeto a la Iglesia Católica, a sus voceros, manifestarles que también hay que solidarizarse, hay que ser sensibles también. Hay que orar por las 35 víctimas, por sus familiares que han sido acribillados, que han sido en realidad masacrados”, declaró Novillo según la red Erbol.
Mediante un comunicado, los obispos cuestionaron la presunta vulneración a los derechos humanos por la situación de Añez, quien permanece en el penal de Miraflores, y consideraron que el sistema judicial se convirtió en una “herramienta de revancha” en manos de quienes controlan el poder.
De esa manera, el informe final del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) estableció que entre septiembre y diciembre de 2019 existieron “graves violaciones a los derechos humanos”.
Entre los hechos significativos, los cuales son considerados como “masacres”, fueron los de Senkata y Sacaba donde perdieron la vida al menos 20 personas y cientos resultaron heridos.
El titular de esa cartera de Estado, afirmó que la prisión preventiva, en la que se encuentra Añez, no es por el “capricho” de alguien sino por delitos que pesan en su contra por su participación en los hechos de 2019 desde que asumió la Presidencia de forma “irregular”.
Asimismo, por haber autorizado el Decreto Supremo 4078 el cual establecía que las Fuerzas Armadas estén exentos de responsabilidad durante las intervenciones a protestas.
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