Sin indiciar nombres, el exmandatario Evo Morales reveló el domingo 27 de junio que instruyó negociadores post octubre 2020 ante la existencia de susceptibilidad del Movimiento al Socialismo (MAS) que Luis Arce no pueda acceder al poder como Presidente del país.
La revelación la realizó en el entorno de explicar el video que circuló en días precedentes en la que Morales afirma que se debe cuidar al exgobierno de Jeanine Añez para garantizar las elecciones generales de 2020.
“Yo hablé con los compañeros y con el compañero Lucho, que debíamos organizar el post 18 de octubre, porque no nos entregarían el poder por más que ganemos, le dije que busque al responsable de contactarse con las Fuerza Armadas, con la Policía, con el sector privado y con la Iglesia Católica”, declaró Morales en su programa dominical, “Evo es pueblo”.
El líder del MAS admitió que fue el principal operador del proceso electoral y señaló que la tarea se realizó desde su residencia en Argentina para garantizar la posesión de Luis Arce y David Choquehuanca.
También afirmó que gracias a esa estrategia se pudo lograr el 55 por ciento de los votos y para eso se comunicó telefónicamente con los dirigentes.
Aseguró que el video que circuló en las redes sociales fue grabado en el congreso de la federación Trópico, los días 28, 29, y 30 de mayo, cuando le pidieron una evaluación de las elecciones 2020.
Asimismo, detalló los tres caminos que tenían ante la posibilidad de que se volviera a postergar las elecciones más allá de octubre: permitir que se haga cargo un militar, que asuma el mando Eva Copa, o que sea la presidente del Tribunal Supremo de Justicia de ese entonces.
Según Morales, todas estas alternativas apuntaban a postergar más aún las elecciones pactadas para octubre.
Manifestó que uno de los principales impulsores de la fórmula “fuera Añez”, era el fallecido dirigente Felipe Quispe “El Mallku”, que era el pedido de Branko Marinkovic, y por eso se desechó esa posibilidad.
También aseveró que continuar con los bloqueos de caminos en agosto del año pasado estaba desgastando a los movimientos indígenas y por tanto era “estratégico” levantar esa medida, con tal de garantizar las elecciones.
Añadió que si las elecciones generales se realizaban en mayo del año pasado, tal vez se habría definido en segunda vuelta porque el Gobierno de ese entonces estaba fortalecido y que la pandemia del coronavirus y las denuncias de corrupción botaron por el suelo el respaldo que tenían.
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