Con bastantes necesidades, pero con la convicción de dejar un buen legado en generaciones jóvenes, la Asociación de Bibliotecarios de Oruro (ABO), cumplió 52 años de representar a aquellos trabajadores que tienen la tarea de resguardar, organizar y archivar textos que documentan diversas historias de la vida.
Sin siquiera tener una sede propia, los integrantes de esta asociación permanecieron en constante capacitación en el manejo y organización de bibliotecas, actualmente ya no organizan eventos ni actividades culturales, debido a la pandemia ocasionada por el Covid-19, ya que la mayoría de los integrantes son de edad avanzada.
La actual presidente de la ABO, Ingrid Patzi indicó que esta organización está estructurada de 30 componentes, de los cuales 15 participan activamente y los demás solo figuran en planillas.
Asimismo, Patzi indicó que actualmente no reciben ningún apoyo de las autoridades locales, ni nacionales y mucho menos internacionales, para colaborar con capacitaciones o actividades para fomentar la lectura y la misma capacitación de personas que les guste la bibliotecología.
APORTES SIGNIFICATIVOS
Entre los aportes más importantes de la ABO, está el haber participado y organizado las Reuniones Nacionales de Bibliotecología, realizadas con el apoyo del Centro Pedagógico y Cultural de Portales, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) y su oficina de enlace en Bolivia y el Instituto Boliviano de Cultura.
Estas actividades sirvieron para contribuir al mejoramiento de la enseñanza, promover una educación de masas y estimular las actividades culturales en Bolivia.
El Centro Pedagógico y Cultural de Portales (hoy Simón I. Patiño) lideró un insólito movimiento bibliotecario en el cual la Asociación de Bibliotecarios de Oruro participó de forma militante.
HISTORIA DE LA ABO
El 3 de julio de 1969, un grupo de bibliotecarios, entre hombres y mujeres, se reunió para dar un paso trascendental en la organización de las bibliotecas de Oruro y asumir el desafío de apoyar al desarrollo de la Bibliotecología boliviana.
Con el lema «Imbuidos de un alto sentido de responsabilidad y apego a la vocación y al servicio bibliotecarios», procedieron al acto formal de creación de la Asociación de Bibliotecarios de Oruro, que designó su primer directorio encabezado por el Dr. Rodolfo Espinoza, quien documentó esta gesta en su libro Acción bibliotecaria.
El acto se realizó en la Biblioteca Central de la Universidad Técnica de Oruro (UTO), considerado como un laboratorio de la cultura, que acogió a los bibliotecarios de la localidad para dar nacimiento a una entidad que, en el futuro habrá de convertirse en consejera y asesora del funcionamiento técnico de las bibliotecas.
La ABO participó en congresos internacionales en representación de Bolivia, como en el Congreso Internacional número 34 en Buenos Aires, organizado por la Asociación Argentina de bibliotecarios Graduados, esto en el 2000.
Asimismo, en el Congreso Mundial de la IFLA, en Argentina en 2004, igualmente tuvo la oportunidad de ofrecer la sede del tercer Congreso Nacional del Colegio de Profesionales en Ciencias de la Información Bolivia (Cpcib), en 2006.
Cada año se realizan congresos seminarios, talleres, etc., en los cuales los socios asisten paulatinamente, actualmente por la pandemia del coronavirus, en muchos lugares cerraron las bibliotecas por el peligro que representa esta enfermedad.
Por lo cual, los presidentes de las asociaciones de bibliotecas de los nueve departamentos del país realizaron el libro titulado “Protocolos de bioseguridad para bibliotecas archivos, museistas y documentalistas”.
Actualmente se realizan seminarios, charlas y encuentros con el Cpcib, por lo que algunos socios asisten mediante la plataforma Zoom, Google Meet, y otros medios.
La ABO en el 2001, tramitó las documentaciones para hacer que los socios puedan realizar sus estudios en la Universidad Mayor San Andrés (UMSA), con el programa de formación de técnico universitario medio de bibliotecología y ciencias de la información, con la modalidad a distancia. Y con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
En 2019 se llevó acabo la inscripción y el mapeo para obtener el certificado de Competencias del Ministerio de Educación, Deportes y Culturas, con un título de gestores en organización y servicio de unidades de información documental. Culminando en octubre de 2020.
LA PRIMERA DIRECTIVA
Entre las personas que formaron la primera directiva de la asociación, estaba Rodolfo Espinoza, Guido Perales, Vicente Tejerina, Mario Pinto, Roberto Rocha, Mario Auza y Jorge Fajardo; Emma de Dupleich, Clotilde Calancha y Teresa Calero.
Junta avalada por 19 participantes de la reunión, entre ellas autoridades del Departamento de Extensión Cultural, Dirección General de Bibliotecas (UTO), Jefatura del Distrito Escolar y Alianza Francesa; representantes de las Bibliotecas Central, Facultativas de Ingeniería Industrial, Nacional de Ingeniería, Economía, Derecho.
De igual manera, la Biblioteca Municipal, bibliotecas de la Empresa Minera de San José, Sociedad de Socorros Mutuos de Artesanos, del Colegio Angloamericano entre otros.
