Si los militares admiten reconocer sus presuntos delitos de robo con intimidación y porte de arma de fuego y municiones, podrá avanzar la investigación, aseguró la jornada pasada el ministro del Interior de Chile, Rodrigo Delgado.
El funcionario señaló que este caso de los tres militares bolivianos debe ser una advertencia para que ninguna persona cruce la frontera de ese país para cometer delitos.
“Hemos tratado de que la investigación sea lo más profunda posible con todos los elementos posibles”, indicó Delgado, según reportó el periódico Los Tiempos.
La autoridad chilena afirmó que su Gobierno respeta la decisión de la justicia, y revocará la detención preventiva para los tres militares bolivianos que fueron detenidos en la zona de Colchane a principios de este mes.
Por su parte, el ministro de Defensa de Bolivia, Edmundo Novillo destacó que el Gobierno del vecino país cumplió lo acordado respecto a la detención domiciliaria que deben realizar los tres militares en un hotel de la ciudad de Pozo Almonte.
“Cumplimos con nuestra palabra. Obtuvimos la liberación de los tres compatriotas militares bolivianos, detenidos injustamente por Chile cuando cumplían labores de lucha contra el contrabando”, escribió Novillo en su cuenta de Twitter.
El Ministerio de Defensa del país señaló que el personal del Ejército e integrantes de la Fuerza de Tarea Conjunta “Bravo” Huachacalla se entró a territorio chileno para realizar su labor de lucha contra el contrabando.
Los uniformados bolivianos fueron detenidos por Carabineros que realizaban patrullajes en la zona fronteriza, actualmente los militares Jaime Herbas Fuentes, Nijer Ponce Flores y José Edilberto Bautista Carvajal están bajo arresto domiciliario en un hostel de la ciudad de Pozo Almonte.
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