El fiscal departamental de Oruro, Aldo Morales, ha señalado que existen discrepancias entre las versiones de los sindicados y los indicios recolectados por los investigadores en el caso del fallecimiento del capitán Juan Pablo Romero, perteneciente al Comando Estratégico Operacional de Lucha Contra el Contrabando (CEO-LCC). Ante esta situación, la Fiscalía ha activado las pesquisas por el delito de homicidio.
Según Morales, las pesquisas han revelado la presunta participación de un sargento y un suboficial en la muerte del capitán Romero. Ambos uniformados se encuentran aprehendidos y esperan su audiencia cautelar. Debido a la gravedad del caso, la Fiscalía tiene la intención de imputar cargos y solicitar la detención preventiva de ambos en el penal de San Pedro en Oruro.
Possible implicación de otras personas
El fiscal no descarta la posible implicación de otras personas como cómplices o encubridores. En el marco de la investigación, se están realizando pericias en celulares, vehículos y ropa del capitán.
Fallecimiento con fracturas graves
La autopsia reveló que el capitán Romero sufrió fracturas en las costillas y clavícula, así como daños severos en un pulmón que provocaron su fallecimiento. Las versiones proporcionadas por los sospechosos sobre una supuesta emboscada por 30 personas carecen de evidencia respaldatoria según lo indicado por el fiscal Morales.
Sospechosos también formaban parte del CEO
El viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Daniel Vargas, confirmó que los dos sospechosos también formaban parte del CEO y anunció que se están tomando medidas legales tanto desde el viceministerio como desde el CEO como víctimas en este caso de homicidio.
Familia exige sanción a responsables
La familia del capitán Romero ha exigido que se sancione a los responsables de su muerte. Tanto la Fiscalía como las autoridades competentes se comprometen a esclarecer los hechos y hacer justicia en este lamentable suceso.