Un nuevo incendio en el mayor vertedero de Panamá ha generado humo tóxico que se extiende sobre la capital y sus alrededores. El Instituto de Meteorología e Hidrología de Panamá ha emitido una alerta por la calidad del aire, recomendando precaución en la salud respiratoria y alergias debido a los gases tóxicos. El índice de calidad del aire en el Parque Metropolitano, considerado el pulmón de la Ciudad de Panamá, ha sido calificado como moderado a desfavorable. Se insta a prestar especial atención a los grupos de personas sensibles.
El relleno sanitario Cerro Patacón, que recibe más del 40% de la basura generada en Panamá, ha sufrido varios incendios en lo que va de 2024. El último incendio, que comenzó el pasado viernes, ha causado un intenso olor a quemado en la ciudad. Aunque las autoridades informan que el incendio está confinado en un 60%, la nube tóxica ha cubierto gran parte de la capital. El Gobierno ha reconocido que Cerro Patacón es un desastre ambiental, sanitario y de imagen para el país.
Denuncia y licitación por los incendios en el vertedero
El administrador general de la Autoridad de Aseo Urbano y Domiciliario, Rafael Prado, ha anunciado que se presentará una denuncia ante el Ministerio Público debido a los incendios en Cerro Patacón. Además, se ha programado una licitación para la operación transitoria del vertedero por tres años, con un costo de 46.8 millones de dólares. El Gobierno busca una nueva empresa que gestione el relleno sanitario debido a las críticas por la falta de transparencia y la mala gestión del sitio.
Impacto ambiental y problemas de gestión en el vertedero
Cerro Patacón abarca más de 130 hectáreas, pero su toxicidad se extiende a unas 9 mil hectáreas, según estudios ambientales. Los ambientalistas critican la mala gestión del sitio, que incluye la disposición y tratamiento inadecuados de los residuos, la falta de clasificación y reciclaje, el déficit de personal y el retraso tecnológico. La recolección de basura es uno de los problemas más graves en Panamá, atribuido a deficiencias en la recogida y a una falta de cultura de depósito de desperdicios.