El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, declaró este lunes que la Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (Acnudh) en Caracas, cuyas actividades fueron suspendidas el jueves pasado por orden del Ejecutivo, se dedicaba al espionaje y la conspiración.
«Esa oficina se desvió (…) se transformó en una oficina de espionaje interno, de conspiración interna (…) en el bufete de abogados de terroristas, conspiradores, golpistas y magnicidas de Venezuela», expresó el mandatario durante su programa semanal de televisión.
Funcionarios buscaban «expedientes»
Aseguró que su Gobierno reportó a la ONU en al menos diez ocasiones estas supuestas irregularidades, entre las que mencionó que los funcionarios de la Acnudh «se pasaban buscando» expedientes y «aplicando el colonialismo judicial».
«Fue esa oficina técnica y algunos de sus voceros quienes rompieron los términos, los principios del acuerdo firmado; violaron la letra y el espíritu de la Carta de Naciones Unidas», remarcó.
Revisión de los acuerdos con la ONU y expulsión de funcionarios
Además de suspender las actividades de esta oficina establecida desde septiembre 2019, el Gobierno venezolano señaló que realizará una «revisión integral» de los términos acordados con esta organización en los próximos 30 días y ordenó la expulsión de 13 funcionarios que operaban en Caracas.
«Todos salieron del país el sábado afortunadamente y hasta tanto esa oficina no respete la letra de la Naciones Unidas, la independencia y soberanía venezolana; no rectifique ni pida disculpas públicas, no regresarán al país. Esperamos una rectificación», insistió este lunes el líder chavista.
La decisión de expulsar a estos funcionarios se produjo un día después de que el relator especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación, Michael Fakhri, asegurara que el Gobierno venezolano le impidió visitar centros de detención y que las autoridades cambiaron constantemente su agenda durante su visita de dos semanas al país, que concluyó el miércoles.
Fuente EFE