Una ofensiva militar de Israel en Rafah, área ubicada en el extremo Sur de la Franja de Gaza donde residen más de un millón de civiles palestinos, la mayoría desplazados, sería considerada un crimen de guerra debido a que se trata de una zona superpoblada, según declaró este martes 6 de febrero un portavoz de la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de las Naciones Unidas.
«De acuerdo con el derecho internacional humanitario, el bombardeo indiscriminado en áreas densamente pobladas puede constituir un crimen de guerra. Para ser claros, si las hostilidades se intensifican en Rafah bajo estas circunstancias, podrían producirse grandes pérdidas civiles», afirmó el portavoz del organismo, Jens Laerke.
Aumento exponencial y emergencia en salud mental
La población en Rafah se ha quintuplicado desde el inicio del conflicto el 7 de octubre y ahora supera los 1,1 millones personas. Esto ha llevado a que todos los indicadores alcancen niveles extremadamente graves y apuntan hacia una inminente crisis sanitaria debido a la falta total de servicios públicos. Además, «la emergencia en salud mental es algo que ya está comprobado. Todos y cada uno de los niños sufren algún tipo de trauma», recalcó Laerke.
Llamado para evitar crímenes contra civiles
Como testigo presencial ante esta situación, Laerke señaló que las Naciones Unidas deben advertir sobre lo que podría ocurrir si Israel cumple con su anunciada invasión terrestre en Rafah. Esta orden incluye la evacuación forzosa desde otras partes del territorio palestino hacia esta área. «Podemos dejar claro lo que establece la ley. Según el derecho internacional humanitario, el bombardeo indiscriminado en áreas densamente pobladas puede constituir un crimen de guerra y debemos hacer todo lo posible para evitarlo», declaró.
Ataque a oficinas de ayuda humanitaria
Durante la misma conferencia de prensa, un representante de la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR) denunció el más reciente ataque contra las oficinas de la Media Luna Roja Palestina, entidad equivalente a la Cruz Roja en los países occidentales. En este ataque falleció la responsable de los jóvenes voluntarios en toda la Franja de Gaza. «Fue asesinada el viernes mientras realizaba su labor diaria, ayudando a los heridos y a los desplazados internos…», lamentó Tommaso Della Longa, portavoz de la FICR. Además, señaló que esta es ya la undécima vez que deben denunciar un crimen similar. «Esto muestra el nivel de violencia al que ha llegado esta situación. Los trabajadores humanitarios no tienen protección y los hospitales son objetivo de ataques», denunció.
Fuente: EFE
