La selección de El Salvador no ganó, no lo ha hecho desde 2022, pero tampoco perdió. Aunque así hubiera sido, no importaría porque sería ante Lionel Messi, quien con su fútbol logró llenar el estadio más grande del país e hizo que unas 30.000 gargantas volvieran a alentar a la Selecta.
Con un empate 0-0 en el estadio Cuscatlán, en San Salvador, el Inter Miami inició su primera gira internacional de juegos amistosos que lo llevará a Arabia Saudita, Hong Kong y Tokio. Además, este partido marcó el inicio de la era de Messi y Luis Suárez en su ataque, acompañados por los exbarcelonistas Jordi Alba y Sergio Busquets.
Comienzo forzado para la Selecta
La historia de este juego para la Selecta también marcó un comienzo forzado debido a la vorágine de no ganar ningún tipo de juego durante más de un año y las controvertidas salidas de los técnicos Hugo Pérez y Rubén de la Barrera. De la Barrera solo estuvo tres meses en el banquillo antes de irse a dirigir en Portugal.
Afición salvadoreña busca regresar al Mundial
La salida del español De la Barrera fue una sorpresa desagradable para los aficionados que ven en las eliminatorias para el Mundial 2026 una oportunidad para regresar a esta competencia ante la ausencia de México, Estados Unidos y Canadá como anfitriones. El Salvador no juega esta instancia desde 1982.
El mágico saque inicial de Jorge González
Como cábala, Jorge «Mágico» González realizó el saque inicial. Su presencia ayudó a calentar aún más las gargantas y recordar su fútbol excepcional que lo posiciona como el mejor jugador de la historia salvadoreña.
Debut del técnico español David Dóniga
Este partido amistoso fue el debut del técnico español David Dóniga con El Salvador. Tuvo menos de 15 días para reunir un grupo, planificar su estrategia y tratar de dejar una mejor impresión en los aficionados.
Dóniga, quien ha prometido luchar por clasificar al Mundial 2026, tuvo en Messi a su mejor aliado para liberar presión y no temer tanto a la derrota porque, al menos en esta ocasión, perder no sería lo peor. No se enfrentaban ante cualquier equipo, sino ante el campeón del mundo, ganador del «The Best» y poseedor de 8 balones de oro. Messi es el futbolista más querido por la afición salvadoreña.
El estadio «Coloso de Monserrat» se viste de gala
El estadio «Coloso de Monserrat» se vistió de gala para recibir a Messi. Predominó el rosa del Inter Miami con el número 10 en las espaldas de miles de hinchas que apoyaron tanto al visitante como al local.
Como era esperado, se escuchó ¡Messi, Messi, Messi! desde antes que saliera al campo y se repitió con cada toque de balón. Pero también regresó ¡El Salvador, El Salvador, El Salvador!. La salida al campo del combinado salvadoreño fue como romper el hielo; los aplausos fueron instantáneos y no hubo abucheos que ensombrecieran a la Selecta.
Dóniga cerca de la victoria
Las pinceladas de los exbarcelonistas y las llegadas peligrosas generaron aplausos por igual en un juego que terminó tras 90 minutos pero solo duró 45 debido a los cambios realizados por el «Tata» Martino, quien sacó a Messi, Busquets, Suárez y Alba. El aliento de los aficionados, que momentos antes habían realizado una ola que dio tres vueltas al estadio, disminuyó. Algunos comenzaron a salir y otros prestaron menos atención.
Una tregua para la Selecta
Sin embargo, esto también jugó a favor de Dóniga, quien estuvo cerca de debutar con una victoria pero se lo negó el poste en la ocasión más clara del partido. El Salvador no ganó; no lo ha hecho desde hace más de un año. Pero tampoco perdió y esto, ayudado por el magnetismo de Messi, le da una tregua a la Selecta con la afición, al menos hasta el siguiente juego.
Fuente: EFE