Las lluvias que se presentaron en la madrugada del jueves en Santa Cruz alcanzaron a varias comunidades que habían sido afectadas por los incendios. Este fenómeno también benefició al municipio de San Matías, generando un rayo de esperanza entre los habitantes de la zona.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) emitió un informe este jueves que confirma la ocurrencia de lluvias “muy localizadas” en el Norte Integrado de Santa Cruz. También se reportaron precipitaciones en municipios chiquitanos como San Javier y San Ramón, donde se registró un aproximado de 20 milímetros por litro cuadrado.
Esperanza en las comunidades
A pesar de que algunas comunidades, como Concepción, no recibieron lluvias, los habitantes mantienen la esperanza de que las precipitaciones continúen. Esto es crucial para mitigar las llamas y sus efectos perjudiciales en la salud de la población.
Reacciones de la ciudadanía
La caída de lluvia sorprendió a los ciudadanos, quienes se mostraron optimistas ante la posibilidad de que se reduzca la contaminación provocada por el humo de los incendios.
Situación en Cuatro Cañadas
En el municipio de Cuatro Cañadas, específicamente en la colonia Chihuahua, también se registraron lluvias. Desde la comunidad de Las Petas, se compartieron imágenes que muestran cómo las precipitaciones cayeron en horas de la madrugada en este sector, donde recientemente se habían quemado 4 viviendas.
A pesar de que la lluvia no fue intensa, se espera que haya llegado hasta Ascensión de la Frontera, ayudando a aplacar las llamas y los focos de calor. Sin embargo, hasta el momento, las lluvias no han alcanzado el área urbana del municipio fronterizo.
Condiciones en la capital cruceña
En la capital cruceña, se observó una leve y persistente llovizna que continuó hasta cerca de las 06:00 horas. Se anticipa que esta situación persista al menos durante parte de la mañana, lo que podría contribuir a disminuir la contaminación ambiental y mejorar la calidad del aire.
Expectativas de otras comunidades
No obstante, los comunarios de otros municipios chiquitanos lamentan que no hayan recibido lluvias y esperan ser “bendecidos” con agua desde el cielo para ayudar a aplacar las llamas que afectan sus territorios.
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