El viernes 21 de junio, Colombia fue escenario de una serie de atentados terroristas que dejaron un saldo de tres muertos y 13 heridos en el Norte y Suroeste del país. Estos actos de violencia han generado gran preocupación en la sociedad colombiana.
El incidente más grave ocurrió en la localidad de Taminango, en el departamento de Nariño, donde se detonó un carro bomba cerca de una estación de Policía. Como resultado, un policía y una mujer perdieron la vida, mientras que seis personas resultaron heridas. La explosión también causó daños en edificaciones cercanas.
Asesinato de policía en Curumaní, Cesar
En Curumaní, departamento del Cesar, otro policía fue asesinado y un subteniente resultó herido en un ataque. Estos agentes se encontraban realizando una investigación contra el crimen organizado en la zona rural de la localidad.
Policías heridos en ataque en Bolívar
Previamente, seis policías resultaron heridos en un ataque perpetrado con explosivos en el departamento de Bolívar. Estos actos de violencia han generado una gran preocupación en la sociedad colombiana.
Condena del presidente colombiano
El presidente colombiano, Gustavo Petro, lamentó profundamente la pérdida de vidas y expresó su solidaridad con los familiares de los fallecidos y heridos. Además, aseguró que aquellos que elijan la guerra en lugar de la paz enfrentarán las consecuencias legales correspondientes.
Investigación en curso
Las autoridades están investigando qué grupo fue responsable del atentado en Taminango. Se sospecha que el frente «Franco Benavides», una disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), podría estar involucrado. Los departamentos de Nariño, Cauca y Valle del Cauca han sido escenario de una creciente violencia debido a las acciones de estas disidencias y otros grupos criminales.
Estrategia para garantizar la seguridad en el Suroeste del país
El presidente Petro y el ministro de Defensa, Iván Velázquez, presentaron la «Misión Cauca», una estrategia que busca transformar el departamento de Cauca y garantizar la seguridad en esta convulsa zona del país. La misión se enfocará en fortalecer las operaciones militares y policiales para neutralizar a los grupos armados organizados y sus actividades ilícitas, como el narcotráfico, la extracción ilegal de minerales y la extorsión.
La violencia en Colombia sigue siendo un desafío importante para el gobierno y la sociedad en general. Es fundamental tomar medidas efectivas para garantizar la seguridad y la paz en todo el país.
