El ministro de Seguridad de El Salvador, Gustavo Villatoro, informó el reciente jueves que están «pendientes de capturar» entre 18.000 y 20.000 supuestos pandilleros en el marco del régimen de excepción vigente desde marzo de 2022, el cual suspende garantías constitucionales como el derecho a la defensa.
«Más o menos estamos hablando de una cifra entre 18.000 y 20.000 (pandilleros) pendientes de capturar», indicó en una entrevista televisiva.
Desde la aprobación del régimen de excepción, que ha sido extendido por la Asamblea Legislativa en 21 ocasiones a petición del Gobierno de Nayib Bukele, se han realizado más de 75.000 detenciones.
Vigencia del régimen cuestionada
«Tenemos un control de todo lo que llevamos, las fichas pendientes», indicó el funcionario, quien defendió la vigencia del régimen de excepción.
El Gobierno atribuye a esta medida la marcada reducción en los homicidios durante los últimos años, aunque la cifra ha descendido durante ocho años consecutivos hasta llegar a una tasa actual de 2,4 según datos proporcionados por el Gobierno de Bukele.
Cifras cuestionadas por derechos humanos
No obstante, estas cifras han sido cuestionadas por defensores de derechos humanos y académicos debido a que no incluyen las muertes ocurridas en enfrentamientos entre supuestos pandilleros y policías ni los fallecidos dentro de centros penales o aquellos asesinatos cometidos por ciudadanos contra supuestos delincuentes; tampoco se suman las osamentas encontradas.
Estos casos sí eran incluidos en las cifras proporcionadas por los Gobiernos anteriores, con las cuales el Ejecutivo de Bukele compara sus números.
Pandillas resistentes a planes de seguridad
Las pandillas, un fenómeno considerado como herencia de la guerra civil (1980-1992) y que se fortaleció con la deportación de pandilleros desde Estados Unidos, han resistido a los planes de seguridad implementados en las últimas cuatro Administraciones.
Fuente: EFE.
