Familiares y amigos de los dolientes, dieron el último adiós al niño Cristian que fue asesinado por defender a su prima durante un robo armado, la noche del domingo reciente en la zona San Felipe de Seque de El Alto, La Paz.
La vida de Cristian, un niño de 11 años que soñaba con ser Policía, se apagó el domingo por la noche tras ser interceptado junto a su prima cuando llegaban al inmueble.
El menor fue torturado y golpeado con un objeto contundente en la cabeza por Roger Mamani, autor material del hecho y quien después aprisionó su cabeza cubierta con una bolsa negra.
Su prima, Cristina, a quien los delincuentes le dieron por muerta luego de darle 15 puñaladas, atada de manos y pies, escuchó desde el piso de su sala los golpes con los que le quitaron la vida al niño, a quien ella había pedido que la acompañe esa noche para protegerla en su casa, donde vivía sola. Vivieron horas de terror según el reporte de Pagina Siete.
La madre de Cristian murió cuando él tenía un año. El niño era criado por su abuela y tías, pero veía en Cristina la imagen materna que le hacía falta y por eso era la compañía indicada para cuidar de ella.
EL ATAQUE
Cristina vive sola desde hace cuatro años, luego de una separación, y se dedica a la venta de carne. La noche del domingo a las 19:00 horas, cuando llegó con su auto deportivo a su casa en la zona Río Seke, de El Alto, ella observó algo sospechoso.
“Vi en la esquina a una pareja que estaba con su hijo en brazos, no los reconocí porque estaban con barbijo, comenzaron a caminar y pasaron frente a la casa. Metí el auto al garaje y quería cerrar rápido la puerta, cuando el hombre se vino hasta mí y puso su pie en la puerta”, narró Cristina, sentada en una silla de ruedas en el Hospital La Portada, donde fue atendida de los golpes que recibió en la cabeza y las 15 puñaladas con las que Roger Mamani creyó que la había asesinado durante el asalto.
El niño se había dormido en el auto y no despertó hasta que su prima fue tendida en el piso, a golpes. El ataque duró hasta eso de las 21:00 horas, cuando Mamani y su pareja, María M.L., se marcharon de la casa, luego de haber tomado dinero, joyas, electrodomésticos y objetos de valor, todo en una camioneta que también era de Cristina.
Contó que, en el piso de su sala, luego de maniatarla y amordazarla, Mamani le cubrió la cabeza con una manta. Después sintió los golpes que le propinó con el fierro, en ese momento rogó a Mamani para que deje ir al niño y le ofreció su vida a cambio de que no dañe a su primo. El hombre no hizo caso a las súplicas y luego de cargar sus pertenencias en su propia camioneta volvió al cuarto donde tenía atado a Cristian.
Desde el piso de su sala Cristina sólo escuchó los golpes. Recuerda que la mujer de Mamani preguntó por ella y ambos ingresaron a la sala para verificar los latidos de su corazón, Cristina dejó de respirar, “la he matado”, dijo el sujeto y la dejaron.
Minutos después, Cristina logró zafarse de las ataduras de los pies y abrió la puerta con los dientes. En la calle pidió ayuda a un hombre que se la negó y fue otro vecino quien la auxilió. Entró a su casa y halló a su primo muerto en la cama.
La Policía habría acudido al lugar a las 02:00 horas y pese a la burocracia con la que atendieron el caso con la Fiscalía, según la denuncia de la familia, primero detuvieron al hermano de Mamani y después, antes de mediodía, capturaron al asesino y su mujer cerca de la localidad de Morocollo, a pocos minutos de la frontera con Perú.
El individuo se resistió al arresto y negaba haber cometido el crimen, pese a que fue hallado con el vehículo robado y todos los objetos de Cristina.
Roger Mamani se negó a declarar, pero fue imputado junto a su pareja María M.L.Z., por infanticidio y robo agravado. La Fiscalía pedirá detención preventiva para la pareja en Chonchocoro y Obrajes, informó el fiscal departamental de La Paz, William Alave, según el reporte de Opinión.