El administrador del local nocturno “Pecados”, donde se encontraron 40 menores de edad consumiendo bebidas alcohólicas el pasado sábado en la ciudad de Oruro, fue enviado a la cárcel de San Pedro con detención preventiva por un periodo de cuatro meses. Esta información fue confirmada por el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), comandante Martín Arequipa.
Detalles del operativo
El operativo se llevó a cabo el sábado 17 de mayo por la noche, en coordinación con la Dirección de Igualdad de Oportunidades (DIO). Esta acción forma parte de un plan de control intensificado contra la trata y tráfico de personas. La intervención tuvo lugar en el nightclub ubicado en las calles Sucre y Brasil, donde, además de los menores, se encontraron 5 personas adultas.
Según el reporte policial, los adolescentes rescatados tenían entre 14 y 17 años. En el lugar, se evidenció la venta y consumo de alcohol a menores, así como la presencia de una habitación con cama, preservativos usados y botellas, lo que generó mayor preocupación entre las autoridades.
Detención del administrador
El administrador, identificado como Inti Luis, fue aprehendido en flagrancia y trasladado a dependencias policiales, donde fue puesto a disposición del Ministerio Público. Tras la audiencia de medidas cautelares, un juez determinó su reclusión preventiva por 4 meses mientras continúan las investigaciones por el presunto delito de corrupción de menores.
“El aprehendido, el administrador de este local, es puesto a conocimiento del Ministerio Público y actualmente ya está con detención preventiva”, afirmó Arequipa.
Situación de los menores
Los adolescentes fueron trasladados a las instalaciones de la Felcc, donde posteriormente fueron entregados a sus padres de familia, previa coordinación con personal especializado. Este proceso se realizó con el objetivo de garantizar la seguridad y bienestar de los menores rescatados.
Clausura del establecimiento
Por otro lado, la Unidad de Defensa al Consumidor del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO) procedió con la clausura definitiva del establecimiento, conforme al Decreto Municipal 114/19. Esta acción busca prevenir situaciones similares en el futuro y proteger a los menores de edad de posibles abusos.
