El alcalde de La Paz, Iván Arias, ha denunciado que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) ha vendido diésel que estaba mezclado con agua. Esta situación ha provocado daños en los motores de 10 maquinarias pertenecientes a la Entidad Descentralizada Municipal de Maquinaria y Equipo (Edmme). En respuesta a estas acusaciones, el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Iván Colque, ha rechazado las afirmaciones y ha anunciado que se abrirá una investigación para determinar el origen de la supuesta contaminación.
Colque ha asegurado que se han seguido todos los protocolos de control de calidad establecidos. Sin embargo, también ha mencionado que la “contaminación” podría haberse producido fuera de la planta de carburantes de Senkata. “Hemos solicitado el certificado de calidad del producto, que nos da certeza de que el combustible está dentro de las condiciones o parámetros técnicos”, afirmó el funcionario.

Daños en la maquinaria
El alcalde Arias ha indicado que el combustible en cuestión contenía “una gran cantidad de agua”, lo que ha ocasionado daños en los motores de 10 maquinarias. “El diésel tenía una gran cantidad de agua. Nos han fregado los motores de 10 equipos. Más bien que sólo pusimos a 10, porque vamos sacando de lote en lote”, señaló Arias.
Investigación en curso
La ANH ha activado una investigación para revisar el protocolo de calidad y los procedimientos de comercialización a grandes consumidores (GRACO). Colque ha subrayado que las primeras fiscalizaciones han establecido que el combustible estaba libre de agua. Esta afirmación ha sido confirmada por otros clientes que recibieron el mismo lote del producto.
/KMMN