El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, mostró su apoyo a la solicitud de empresarios y productores para que el diésel sea retirado de la lista de sustancias controladas. Dorgathen argumentó que la inclusión del diésel en la Ley 1008 representa un obstáculo significativo para la importación y comercialización de este combustible.
Durante una entrevista en el programa No Mentirás, Dorgathen señaló que es más probable que se aprueben créditos internacionales antes de que se realice alguna modificación a la ley. Esta situación afecta la disponibilidad de carburantes en un contexto de crisis.
El presidente de YPFB afirmó que el plan para cambiar la ley no avanzará, ya que se requiere un ajuste a la conocida Ley 1008, que regula el régimen de la coca y las sustancias controladas. Según su opinión, este proceso se estancará, al igual que los créditos internacionales que el Gobierno busca que se aprueben para facilitar el flujo de dólares necesarios para adquirir combustibles en el mercado externo.
Dorgathen expresó: «Estoy de acuerdo, el diésel no debería estar dentro de la Ley 1008 porque no es un precursor; la gasolina es el precursor».
Además, agregó: «Volvamos al punto inicial: si estamos con créditos para el flujo de divisas, cambiar una ley en este momento, cuando nuestros diputados están más preocupados por inventar documentos, generar chismes y hacer política, no van a cambiar la Ley 1008, no lo van a hacer».
En su juicio, «es más fácil que se apruebe un crédito a que cambien una ley si saben que esa ley va a permitir que haya diésel y que no tengamos problemas como Gobierno».
Solicitud de empresarios
En una conferencia de prensa realizada el miércoles, el presidente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz (Fepsc), Óscar Mario Justiniano, pidió a los legisladores que «trabajen en temas estructurales» para encontrar una solución definitiva a la escasez de carburantes. Justiniano planteó la urgencia de eliminar el estatus de «sustancia controlada» del diésel, ya que los productores han denunciado obstáculos en los trámites para la importación directa.
Justiniano comentó: «A pesar de que hemos trabajado recientemente para que se vayan eliminando distintos pasos y hemos logrado 3 decretos recientemente, no es suficiente, porque Sustancias Controladas es un problema transversal absolutamente a todos los productores o las empresas que quieren importar y comercializar el combustible».
Asimismo, cuestionó los conflictos políticos que «están metiéndose en el bolsillo de las familias bolivianas», quienes están sufriendo por la falta de carburantes.
Por esta razón, Justiniano urgió que la modificación de la ley que clasifica específicamente al diésel como sustancia controlada debe ser una prioridad nacional. El ministro de Planificación del Desarrollo, Sergio Cusicanqui, también se comprometió a realizar gestiones para considerar este pedido por parte del Gobierno.
Trámites de importación
Dorgathen destacó que se ha establecido una ventanilla única para facilitar los trámites de importación directa de combustibles. Sin embargo, admitió que la burocracia en la Dirección de Sustancias Controladas sigue siendo un obstáculo significativo.
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