El Gobierno del presidente estadounidense Donald Trump utilizó este viernes 24 de enero de 2025, dos aviones militares para llevar a cabo vuelos de repatriación hacia Guatemala. Esta acción fue promocionada en redes sociales con el objetivo de «enviar un mensaje» sobre la política migratoria de mano dura del Gobierno.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, publicó en la plataforma X que «el presidente Trump está enviando una señal a todo el mundo: si entras de manera ilegal en EE.UU., enfrentarás graves consecuencias». En esta publicación, se compartieron imágenes de las aeronaves utilizadas para la repatriación.
Detalles de los vuelos
Según un funcionario del Departamento de Defensa, los vuelos de repatriación se llevaron a cabo en la noche del jueves a viernes. Despegaron desde la base aérea militar Biggs, ubicada en El Paso, Texas, y cada uno de los aviones transportaba alrededor de 80 personas.
Inicio de deportaciones
La Casa Blanca anunció el viernes que habían «comenzado» las deportaciones de migrantes. Esta acción se refiere a una de las principales promesas de campaña de Trump, que es realizar la mayor operación de expulsión masiva de extranjeros en la historia de EE.UU. Sin embargo, es importante señalar que los vuelos de deportación no son una novedad, ya que se llevaron a cabo de manera constante durante la Administración del demócrata Joe Biden.
Datos sobre repatriaciones
Entre junio y diciembre del año pasado, se realizaron más de 860 vuelos de repatriación, según datos proporcionados la semana pasada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Durante estos vuelos, se expulsaron a más de 271.000 individuos provenientes de aproximadamente 160 países.
Órdenes ejecutivas de Trump
En sus primeros días en el cargo, el Gobierno de Trump firmó una serie de órdenes ejecutivas con el fin de acelerar el proceso de deportaciones de migrantes. Estas órdenes también buscan eliminar el acceso al asilo y militarizar la frontera con México. Trump, quien asumió la presidencia el pasado lunes, llegó al poder con un mensaje antimigrante, prometiendo «erradicar» la migración irregular hacia EE.UU. y expulsar a las personas que no cuentan con un estatus legal en el país.
