Este martes, el empresario y político Samuel Doria Medina presentó un plan que busca abordar la crisis económica y social que, según él, es resultado de un “modelo fracasado” implementado por el actual gobierno.
Durante un evento al que asistieron aproximadamente 300 personas de diversas regiones y sectores sociales, Medina argumentó que Bolivia, a dos siglos de su independencia, necesita liberarse nuevamente para alcanzar estabilidad, justicia y progreso. «Para que los hijos puedan vivir mejor que sus padres, y no al revés”, afirmó.
Cuestionamientos sobre la crisis
Medina también planteó una serie de interrogantes sobre la paradoja de un país rico en recursos naturales que, sin embargo, enfrenta una profunda pobreza y crisis económica. Entre los problemas mencionados, destacó la corrupción, la falta de desarrollo educativo, la ausencia de ambición tecnológica y un modelo económico que ya no es viable. “Es hora de poner manos a la obra”, subrayó, instando a la población a encontrar la “llave del futuro” para abrir estas cerraduras.
Transformación del Estado
La propuesta más destacada del político es transformar el Estado en un ecosistema de un millón de emprendimientos, que otorguen independencia y desarrollo personal, especialmente a los jóvenes. Medina señaló que el turismo podría ser un motor clave para la economía, con la meta de atraer dos millones de visitantes extranjeros y generar 3.000 millones de dólares anuales. Para lograr esto, enfatizó la necesidad de servicios estatales adecuados, capacitación emprendedora y la promoción de un entorno favorable para nuevos negocios turísticos.
Devolución de dólares
Medina comenzó con la primera solución, que es devolver los dólares al país. Según él, esto requiere de una acción decidida en los próximos 100 días, utilizando toda la ayuda internacional que sea posible. Su objetivo es cambiar la percepción de la población sobre el dólar, argumentando que, al estabilizar su valor, se podrá mitigar la escasez de combustibles y anular el mercado paralelo de divisas.
Autonomías regionales
La segunda solución se enfoca en las “autonomías regionales”, insistiendo en que las regiones deben coproducir la riqueza nacional en lugar de ser meramente receptoras de fondos estatales.
Cuidado del dinero
La tercera solución es cuidar el dinero de los bolivianos, deteniendo el “saqueo” que, según él, ha perpetrado el Movimiento Al Socialismo (MAS) durante dos décadas. Medina propuso que el Estado y todas sus entidades operen bajo el principio de “solo se gasta lo que se tiene”, enfatizando que los recursos faltantes son producto de la corrupción.
Libertad de exportaciones
La cuarta solución consiste en incluir la liberación de exportaciones, cielos abiertos y un clima favorable para la inversión, tanto nacional como extranjera.
Meritocracia en el país
La quinta solución se centra en establecer un país donde el mérito importe. Medina criticó la práctica de nombrar a familiares y amigos en posiciones de poder, sugiriendo que solo los más comprometidos con el desarrollo del país deberían ocupar cargos importantes.
Agenda ambiental
Además, planteó una agenda nacional para salvar el medioambiente, que incluye derogar leyes incendiarias que destruyen bosques e imponer penas severas para quienes los queman. Entre sus propuestas y soluciones, destacó la importancia de la cooperación regional, firmando su compromiso de liderar la transformación del modelo económico actual.
