El secretario general de la Confederación Sindical de Chóferes de Bolivia, Víctor Tarqui, ha expresado su rechazo a la convocatoria de un paro y bloqueo de caminos que ha sido programado por una facción de la Federación de Campesinos Túpac Katari, bajo el liderazgo de David Mamani. Este paro está previsto para comenzar el 16 de septiembre. Tarqui ha advertido que estas acciones no solo perjudican el libre tránsito, sino que también amenazan con empeorar la situación alimentaria en el país.
El dirigente sindical ha enfatizado que el transporte necesita operar con normalidad y que no es el momento de buscar confrontaciones. Por ello, el sector ha manifestado su desacuerdo con los bloqueos convocados, ya que estos afectarían a toda la población del país.
En una reunión que fue convocada por David Mamani la semana pasada, se decidió llevar a cabo un paro que incluirá bloqueos de caminos. Las demandas de esta facción incluyen la renuncia del Presidente Luis Arce, además de amenazas de saquear la provincia Murillo.
Intereses en juego
Tarqui ha señalado que hay muchos intereses que buscan causar daño y ha expresado que no se puede jugar con el hambre de la población. Los bloqueos obstaculizan la transitabilidad y el paso de transporte de alimentos, lo que podría tener consecuencias graves.

“No puede ser que los sectores estén jugándose con el hambre de todo el pueblo boliviano, queriendo ahogar una situación y ese parece que fuera el propósito”, insistió Tarqui. “Lo que necesita el transporte es transitar en todas las carreteras a nivel nacional”.
Preocupaciones de los choferes
La Confederación Sindical de Chóferes de Bolivia ha manifestado su preocupación por las posibles repercusiones sociales y económicas que podrían surgir de estos bloqueos. Esto es especialmente relevante en un contexto donde ya existen tensiones políticas significativas en el país.