Este 2023 de Marcelo en el fútbol brasileño seguramente no se esté desarrollando como él querría. Después de volver a Fluminense para demostrar que todavía tiene mucho que decir a sus 35 años, los problemas físicos no han tardado en aparecer para el exlateral izquierdo del Real Madrid. En el mes de abril el que fuera internacional por la “canarinha” ya sufrió su primer revés en Copa Libertadores, al tener que retirarse del partido frente a The Strongest por problemas físicos. Un mes después, los fantasmas no se han ido y el talentoso futbolista ha sufrido otro traspié.
De nuevo sobre la media hora de partido, Marcelo tuvo que abandonar el terreno de juego en la ida de los octavos de final de la Copa de Brasil ante Flamengo. Esta vez el lateral pudo aguantar sobre el campo 38 minutos, pero los problemas físicos volvieron a envolver su figura para que no pudiera seguir disputando uno de los enfrentamientos más exigentes en el fútbol brasileño. Tras hilar varias titularidades y dejar atrás la lesión de la Copa Libertadores, este “golpe” puede frenar en seco de nuevo al lateral izquierdo, que no deja del todo atrás las lesiones tras volver a su país.
La imagen de su salida del campo no parecía del todo preocupante. Una lesión muscular que podría no ser de mucho alcance, haciendo que vuelva a estar apto más pronto que tarde para seguir las órdenes de Fernando Diniz. No obstante, lo preocupante es el cómo puede afectar todo esto a un Marcelo que en pocos meses en el fútbol brasileño ha convivido con el “sabor dulce” de la victoria y la sensación “amarga” de unos problemas que parecen estar fuera de su alcance.
Su entrenador y compañeros no dudaron en ofrecerle apoyo nada más salir por la línea de cal. Fernando Diniz fue rápidamente a abrazar a su lateral izquierdo titular, porque aunque este tramo de su carrera está teniendo baches, la exigencia del fútbol brasileño todavía tiene que ver al mejor Marcelo.