El Gobierno boliviano trabaja en la creación de un mecanismo similar al “beneplácito” que se utiliza en el servicio exterior para aprobar o rechazar el ingreso de sacerdotes de la Iglesia Católica enviados a Bolivia.
Sacerdotes con denuncias por delitos sexuales
La ministra de la Presidencia, María Nela Prada, afirmó que este mecanismo diplomático impedirá que sacerdotes con denuncias por delitos sexuales cometidos en otros países lleguen a Bolivia y conviertan al país en un «basurero de violadores».
En el pasado, numerosos sacerdotes acusados por pederastia fueron enviados a territorio boliviano mediante un mecanismo utilizado por la Iglesia que les permite rotar a los denunciados, según la ministra.
La ministra Prada explicó que fue el Presidente Luis Arce quien instruyó trabajar en una normativa preventiva como la que rige en el ámbito diplomático.
Según este protocolo, el nombramiento de un embajador corresponde al Gobierno de su nación y una vez seleccionado para la misión de destino, se debe conseguir el beneplácito del país receptor. En caso de ser negativo deberá comunicarse formalmente al país acreditante.
Proyecto para declarar imprescriptibles los delitos sexuales contra niñas, niños y adolescentes
La ministra destacó las decisiones históricas tomadas por el jefe de Estado respecto a la protección infantil y recordó que se envió al Legislativo un proyecto de ley para declarar imprescriptibles los delitos sexuales contra niñas, niños y adolescentes.
Normativa para controlar sacerdotes educadores y guías espirituales
“Ahora estamos trabajando en una normativa, viendo el mecanismo correspondiente a través de nuestro Ministerio de Relaciones Exteriores para que exista un nivel de control en relación a los sacerdotes que vienen a ser educadores, guías espirituales”, precisó Prada.