Veinte países adoptaron el viernes reciente una declaración para una migración “ordenada” bajo el principio de una responsabilidad compartida, como pidió el Presidente estadounidense, Joe Biden, con lo que se clausuró la Cumbre de las Américas.
“Ningún país debería cargar en solitario con los crecientes flujos migratorios”, afirmó Biden, en sus declaraciones en Los Ángeles.
Según el mandatario, se debe trabajar en una migración segura y legal que beneficie al desarrollo económico, y se debe proteger las fronteras contra la entrada irregular, con humanidad.
El término clave para el mandatario de Estados Unidos es “responsabilidad compartida”, debido a que su país no quiere cargar con todo el peso del flujo migratorio.
INMIGRANTES
Estados Unidos acogió a 20 mil refugiados de América Latina en 2020 y 2021 (tres veces más que este año), además prometió desembolsar 314 millones de dólares en ayuda para migrantes en la región.
El número de inmigrantes en Latinoamérica es menor a los 100 mil ucranianos que Estados Unidos se dispuso a recibir tras la invasión de Rusia.
Por su parte, la directora en funciones para las Américas de la oenegé Human Rights Watch, Tamara Taraciuk Broner, considera “positiva” la propuesta pero advierte que para que no se perciba como un intento de lavado de cara, es indispensable que el Gobierno de Biden ponga fin a sus políticas migratorias abusivas y que los Gobiernos latinoamericanos asuman su responsabilidad por los abusos que migrantes y solicitantes de asilo sufren dentro de sus fronteras.
/SVL