Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) descartó este miércoles que vaya a subir el costo de los carburantes y anticipó una serie de acciones para garantizar el abastecimiento, ante el desfase en la distribución de diésel en regiones del país.
El presidente de YPFB, Armin Dorgathen, manifestó que, si el costo de ese combustible estuviera sujeto al mercado internacional, como sucede en otros países, pasaría de 3.75 bolivianos el litro a siete u ocho, es decir, el doble.
“El objetivo que tenemos como política de estabilidad económica es mantener el precio de los combustibles, porque si subimos, aumentará el precio de otros productos, a diferencia de lo que pasa en otros países de la región”, señaló en entrevista con El Deber.
Además, anticipó acciones con la finalidad de duplicar la producción de crudo hasta fin de año, con el objetivo de reducir la importación de carburantes, debido al alto costo que eso implica para arcas del Estado.
“Hoy tenemos un plan de reducción de la importación de combustibles, porque es un costo elevado con el que el Estado trabaja, pero tenemos un plan de sustitución que viene con plantas de biodiesel, importación de crudo, una exploración más agresiva, existen algunos campos petroleros, esperamos duplicar hasta fin de año la explotación de crudo”, afirmó Dorgathen.
Sobre los bloqueos de rutas que se registran en poblaciones de Santa Cruz, como San Julián, la autoridad manifestó que no afectan la llegada de diésel, debido a que los camiones cisternas vienen desde el sur del país. Sin embargo, podría influir negativamente en el abastecimiento a estaciones de servicio.
“Para la importación de combustible el bloqueo de San Julián no afecta, porque el producto entra por el sur, pero si tenemos un bloqueo sobre la refinería o algo que afecte la salida de las cisternas, ahí tendríamos un problema”, detalló el funcionario estatal.
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