La Organización de las Naciones Unidas (ONU) exigió al Estado boliviano la identificación y sanción de los responsables de la muerte del exdirector del Fondo Indígena, Marco Antonio Aramayo, y pidió una compensación a la familia por esa pérdida. El Órgano Judicial del país admitió abusos cometidos y excesos en este caso pero dejarán que las investigaciones determinen si corresponde una compensación por el Estado a la familia.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) emitió en pasadas horas un comunicado en el que pide al Estado boliviano la identificación y sanción de los responsables de la muerte de Aramayo, además de compensar a la familia por esa pérdida.
“Las personas responsables deben ser sancionadas, la familia compensada y se deben tomar medidas, como la reforma estructural de la justicia, incluyendo el sistema penitenciario, para garantizar la no repetición de estos casos”, señala parte del comunicado de esta organización.
Diego García Sayán, uno de los relatores del organismo internacional, estuvo el mes pasado en el país y varias organizaciones de la sociedad civil, le entregaron información sobre este caso. Se prevé que el alto funcionario entregue un informe en Ginebra antes de junio.
Por su parte, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Ricardo Torres, consultado sobre el pronunciamiento de la ONU, señaló que una vez que concluyan las investigaciones sobre este hecho, le corresponde al Estado, en este caso al Ejecutivo, definir una posible compensación a la familia de Aramayo.
“Este proceso no debería haberse ramificado y debería verse conducido solamente a partir de un proceso, dada la naturaleza y el origen del hecho. Rescatando los principios de nuestra legislación y las convenciones internacionales, está prohibida la persecución penal múltiple con un solo hecho”, declaró Torres, respecto al trabajo que desarrolló la Fiscalía, porque es la institución que debe sustentar los procesos a partir de sus pesquisas.
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