En un mensaje con motivo del IV Encuentro Mundial de Movimientos Populares (Emmp) que se desarrolla en el Vaticano, el Papa Francisco abogó este sábado por “un salario universal y la reducción de la jornada laboral” como medida para un mayor acceso de todos al trabajo.
«Un salario universal, para que cada persona en este mundo pueda acceder a los más elementales bienes de la vida», afirmó el pontífice.
Asimismo, señaló que existe la necesidad de cambiar el actual sistema socioeconómico y pidió a Gobiernos, políticos, empresas y líderes religiosos que ayuden en este objetivo.
«Este sistema, con su lógica implacable de la ganancia, está escapando a todo dominio humano. Es hora de frenar la locomotora, una locomotora descontrolada que nos está llevando al abismo. Todavía estamos a tiempo», aseveró.
En ese sentido, también exigió «la liberación de las patentes» de las vacunas, la condonación de la deuda de los países pobres y el cese de la destrucción de «bosques, humedales y montañas», por parte de las grandes corporaciones extractivas.
Reiteró su pedido a Gobiernos y políticos, que «trabajen por el bien común», se cuiden de «escuchar solo a las élites económicas» y «sean servidores de los pueblos que claman por tierra, techo, trabajo y una vida buena» y a los líderes religiosos que «nunca usemos el nombre de Dios para fomentar guerras ni golpes de Estado», según reporte de la agencia internacional de noticias EFE.