Se emitió un comunicado desde el Ministerio de Trabajo que ratifica el 11 de octubre como una jornada laboral normal en todo el territorio boliviano y se advirtió que trabajadores que se ausenten a sus fuentes laborales, serán sancionados de manera económica y administrativa.
El documento marca que no existe ninguna tolerancia respecto al cumplimiento de las obligaciones laborales. El comunicado se emitió, tras la ratificación del paro cívico del 11 de octubre.
“La ausencia a los puestos de trabajo durante esta jornada será considerada falta injustificada y estará sujeta a las sanciones económicas y administrativas que correspondan”, se lee en parte del comunicado.
Las Jefaturas Departamentales y Regionales de Trabajo serán las encargadas de verificar el “normal desenvolvimiento de las actividades laborales”, reportó la red Erbol.
Asimismo, instó que las empresas e instituciones públicas y privadas, deban asumir las “determinaciones necesarias” para asegurar la normalidad de la jornada laboral el 11 de octubre.
El paro fue convocado por los gremiales en rechazo al proyecto de Ley Contra la Legitimación de Ganancias Ilícitas. Cívicos, políticos de oposición, plataformas, entre otros, se sumaron a las protestas demandando que cese la “persecución política”, liberación de presos políticos, entre otros.
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