Según estudio elaborado por la Cámara de Industria y Comercio de Santa Cruz (Cainco) el contrabando de alimentos y bebidas genera una pérdida de 550 millones de dólares y afecta aproximadamente a 125 mil empleos a nivel nacional.
El presidente en ejercicio de la Cainco, Orlando Vaca indicó que hay muchas empresas que se están cerrando o dejan de producir ante la imposibilidad de competir con los bajos precios de los productos introducidos al país vía contrabando.
Explicó que al considerar 12 categorías de productos, incluyendo farmacéuticos y lubricantes, la afectación económica sube a 1.000 millones de dólares.
Manifestó que esa situación surge porque Bolivia tiene como vecinos a “dos colosos comerciales” como Brasil y Argentina que, por sus diferencias cambiarias, ofrecen productos más baratos que los que hay en el país.
Sin embargo, afirmó que existen otros factores que restan competitividad a las empresas nacionales, como la carga tributaria del 84 por ciento que en algunos casos, impide a las empresas nuevas a aguantar su primer año de funcionamiento.
“Y es que las empresas en Bolivia deben efectuar 42 pagos tributarios por año, pese a que la media en la región es de 28”, expresó.
El estudio de la Cainco propone un trabajo conjunto entre el sector público y privado para concretar tres aspectos.
El primero consiste en apoyar el trabajo realizado por la Aduana Nacional y las Fuerzas Armadas (FF.AA.) para detectar y silenciar los puntos de ingreso de mercancía de contrabando en las fronteras.
El segundo aspecto consiste en identificar los productos que ingresaron al país de manera ilegal para decomisarlos y destruirlos.
El tercer elemento tiene que ver con una modificación normativa para considerar un contrabando delictivo cuando la omisión tributaria supere las diez mil Unidades de Fomento de Vivienda (UFV) y no 200 mil.
Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Ibo Blazicevic, informó que el contrabando creció en aproximadamente un diez por ciento entre 2020 y 2021, causando un gran impacto en este sector.
Añadió que esto pone en riesgo a unos 80 mil empleos en el sector industrial.
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