El alto Comisionado de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, exigió a la justicia brasileña una “investigación independiente e imparcial” por la operación antinarcotráfico de la Policía de Brasil, la jornada pasada, en una favela de Río de Janeiro, dejando al menos 25 muertos.
El portavoz de la ONU, Rupert Colville manifestó durante una rueda de prensa en Ginebra (Suiza), la preocupación de lo ocurrido y pidió una investigación independiente e imparcial del asunto, según reporte del portal ABC.
«Hemos recibido informes preocupantes según los cuales, tras lo ocurrido, la Policía no tomó las medidas necesarias para preservar las pruebas en la escena del crimen, lo que podría dificultar la investigación… Pedimos a la oficina del fiscal que lleve a cabo una investigación independiente e imparcial de este asunto, plegándose a las normas internacionales», comunicó Colville.
Según la Policía Civil de Brasil, la operación se debe a que los narcotraficantes estarían incitando a niños y adolescentes a unirse para cometer esos delitos.
Añadieron que los delincuentes realizan el tráfico de drogas, el robo de carga y de personas, de igual manera homicidios y secuestros en los trenes “SuperVia”, los más recientes registrados son en diciembre de 2020 y en abril de este año.
Entre las personas que perdieron la vida está un agente de la Policía, la operación policial antinarcóticos se realizó el jueves 6 de mayo en la favela de Jacarezinho, en la zona Norte de la ciudad, este operativo es considerado como la más sangrienta en la historia de Río de Janeiro, según la Policía de ese país.
La operación se efectuó pese a una decisión del Tribunal Supremo de ese país, que prohíbe a la Policía efectuar este tipo de redadas en las favelas brasileñas durante la pandemia por el coronavirus, exepto en circunstancias «absolutamente excepcionales».
Según datos del Instituto de Seguridad Pública, la Policía de Rio fue responsable de la muerte de 453 personas entre enero y marzo de este año y de 1.245 personas el año pasado.
El portavoz de la ONU recordó a las autoridades brasileñas que solo se debería recurrir a la fuerza en casos estrictamente necesarios y que siempre se deben respetar los principios de legalidad, precaución, necesidad y proporcionalidad de la fuerza letal.
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