Los padres de un niño, fueron aprehendidos por obligar a su hijo mayor a vender siete cajas de chocolates diarias, el menor no cumplió con la venta y lo flagelaron.
Dos personas en el Parque de Montero vieron al niño llorar desconsoladamente y se acercaron a ver qué es lo que pasaba, y el niño contó que su llanto se debía a que no terminó de vender sus chocolates y tenía miedo que sus padres lo lastimaran.
“El niño decía que tenía miedo de regresar a su casa ya que si no vendía las siete cajas su padre le chicoteaba. El menor tenia marcas en la espalda, en el pecho, en los brazos, es por eso que hemos procedido a hacer la denuncia y el rescate del menor”, indicó el representante de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, Abel Mallku en contacto con la red de televisión Unitel.
Tras realizar la denuncia la Policía se dirigió al barrio “Santa Rosita” del municipio montereño y visitaron el lugar donde vive el niño. Encontraron a sus padres durmiendo en plena luz del día, mientras el menor era el que llevaba el dinero recorriendo calles vendiendo los chocolates.
El niño es el mayor de cuatro hermanos y vendía chocolates recorriendo “a pie” las calles de Montero y Santa Cruz, hasta terminar su venta. Él tenía una “cuota fija” que debía entregar de manera diaria, si no cumplía recibía un severo castigo.
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