El exministro de Gobierno, Carlos Romero, afirmó que 300 personas financiaron el «golpe de Estado» y los 21 días de movilizaciones de 2019, que resultaron en la renuncia de Evo Morales a la Presidencia, también dijo que se pagaron sobornos para que jefes policiales y militares se incorporen a las medidas de presión.
«Aproximadamente unas 300 personas dieron dinero para el golpe o para sostener los 21 días (de paro). Ahora, obviamente, algunos lo habrán hecho de forma deliberada porque formaban parte de la conspiración, otros habrían sido chantajeados, extorsionados, había mucha gente que vivía bajo la sombra del pánico», declaró Romero para una entrevista con PAT.
Reveló que durante los conflictos políticos se había movido mucho dinero y que los 300 financiadores de la movilización son de Santa Cruz y, que sus nombres y sus acciones están documentadas.
«Hay planillas, montos, contactos, logística. Toda esa información existe documentadamente. Tenemos registrado los nombres, veremos en qué momento se presenta (…). El dinero se entregaba en efectivo, se registraba el nombre de la persona que entregaba el dinero, la suma…», dijo el exministro.
Por otro parte. Romero dijo que el Comité Cívico Pro Santa Cruz, dirigido en ese entonces por Luis Fernando Camacho, presionó a instituciones y empresarios de ese departamento para que entreguen «aportes» para sustentar la protesta.
«Los de la Gobernación (de Santa Cruz) son más yescas (con menos recursos) si comparamos con los aportes de la Alcaldía de Santa Cruz de la Sierra (…), en algunos casos había aportes que se acercaban a los 200.000 dólares» para organizar las movilizaciones, declaró Romero.
El exministro aseguró que se movió mucho dinero «millones de dólares» y muchas personas para la logística y ejecución de las movilizaciones del año pasado.
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