El administrador de la Caja Nacional de Salud (CNS), José Verduguez Tudela, informó que debido al colapso de la morgue del Hospital Obrero, se definió en la reunión interinstitucional, que la Alcaldía dotaría de un espacio, un “cementerio Covid” para enterrar a los fallecidos en una fosa común. En total se enterraron a 21 cuerpos.
Ante la denuncia de un grupo de dolientes, que afirmó que los cuerpos de 30 fallecidos habían desaparecido de la morgue del nosocomio, Verduguez, convocó a una conferencia de prensa, para explicar que el viernes de la semana anterior, tuvo una reunión con el alcalde Saúl Aguilar y el secretario de la Gobernación, Jhonny Vedia, con el objetivo de explicar el foco de infección que se formaba en el Hospital Obrero a consecuencia del apilamiento de cadáveres.
La autoridad manifestó que los cuerpos eran de personas, en su mayoría, que fallecieron a consecuencia del Covid-19 y que la capacidad de esa morgue es para cuatro cuerpos, pero hasta ese viernes había 30.
Por tal motivo, los cadáveres fueron enterrados cada uno en una fosa común y algunos fueron sepultados en los ataúdes que ya estaban en el Hospital Obrero.
“Respecto a eso, quiero indicar que traté de hacer lo mejor posible por el hospital (…) los cadáveres estaban infectados y al frente está el vestuario de las enfermeras, lo que quiere decir, que yo como autoridad tengo que poner orden en el hospital y si no lo realizaba podía haber peores consecuencias Tal es el Covid, que han fallecido tres médicos y enfermeras”, manifestó.
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