Oruro lleva 68 días de cuarentena desde que se reportó el primer caso de Covid-19 en el departamento.
Esto ha generado gran desestabilidad en comercios y familias, que con el pasar de los días, decidieron aflojar la rígida cuarentena que se vivió en Oruro.
Esta semana, se pudo evidenciar más comerciantes en las calles, y los primeros días, muchas personas salieron de sus casas para abastecerse, sin respetar el día que les corresponde según el último dígito de su cédula de identidad.
Además se diversificó el tipo de negocios que abrieron, pues muchos otros que no son alimento ni de primera necesidad, se encontraban funcionando, incluso el día miércoles, después de dos meses, la Superferia volvió a las calles, aunque no en su totalidad.
Se buscó frenar con la implementación de más control en las calles por parte de la Policía y el Ejército, en operativos que arrestaron a todas las personas que no tenían justificativo para estar en las calles, sin embargo pudo más la necesidad de generar recursos o de abastecerse de la población.
Actualmente existe cierta división en la opinión de la gente, pues mientras muchos piden que se respete y se mantenga la cuarentena, otros piden retomar la normalidad de a poco.
/VEGA/
