El Presidente de Bolivia, Rodrigo Paz Pereira, ha confirmado que asistirá a la toma de mando del nuevo mandatario electo de Chile, José Antonio Kast, programada para marzo de 2026. Este encuentro tiene como objetivo principal reactivar las relaciones diplomáticas entre ambos países, que han estado sin embajadores durante más de 60 años.
Señales de reactivación
El canciller boliviano, Fernando Aramayo, ha calificado esta decisión como una señal estratégica para revitalizar los vínculos con Chile. Según Aramayo, el primer contacto telefónico entre Paz y Kast fue “constructivo y muy positivo”, lo que ha permitido descongelar una relación que no ha tenido rango de embajadores desde hace más de 60 años.
“Necesitamos sentarnos a trabajar con una mirada pragmática y dejar atrás visiones ideologizadas que solo nos condujeron al aislamiento”, afirmó el Canciller en declaraciones exclusivas. La nueva administración boliviana ha dejado claro que su prioridad no será el debate ideológico, sino la resolución de problemas técnicos y económicos que afectan a ambos pueblos.
Agenda bilateral
Con más de 900 kilómetros de frontera compartida, los puntos críticos de la nueva agenda incluyen la optimización logística para mejorar los servicios en el Puerto de Arica y reducir costos al comercio exterior boliviano. También se abordará la seguridad energética con avances en el proyecto de reversa del Oleoducto Sica Sica-Arica.
Además, se buscará fomentar la integración y el turismo mediante la expansión de la conectividad aérea y la firma de acuerdos de facilitación comercial. Otros temas importantes son los recursos hídricos y la minería, así como asuntos ambientales que requieren una gestión técnica conjunta.
Cooperación en seguridad
Mientras los mandatarios se preparan para el encuentro de marzo, los equipos técnicos ya han comenzado a operar. Recientemente, una delegación encabezada por el viceministro de Comercio Exterior, Rodrigo Arce, se reunió en Arica con el embajador chileno Ricardo Bosnic para destrabar temas relacionados con los puertos.
Asimismo, la lucha contra el crimen organizado ha servido como un puente inesperado de cooperación. El Fiscal General del Estado, Roger Mariaca, y su par chileno, Ángel Valencia, han firmado un acuerdo para conformar Equipos Conjuntos de Investigación (ECI), destinados a combatir delitos transnacionales en la zona fronteriza.
Un nuevo enfoque diplomático
Bolivia y Chile han mantenido sus relaciones diplomáticas suspendidas a nivel de embajadores desde 1962, con una breve excepción en los años 70. Sin embargo, el enfoque del gobierno de Paz Pereira sugiere que, aunque los temas históricos permanecen, la urgencia del desarrollo económico y la seguridad imponen una nueva forma de vecindad.
La visita presidencial a Santiago en 2026 no será solo un acto protocolar; será una prueba para una diplomacia boliviana que hoy apuesta todo al diálogo y a los resultados tangibles.













