El Gobierno nacional ha oficializado el Decreto Supremo 5503, que pone en marcha la Ley 1670. Esta ley tiene como objetivo mitigar el impacto de la inflación mediante el diferimiento de cuotas bancarias y la condonación de multas tributarias acumuladas hasta octubre de 2025. La medida está diseñada para beneficiar a microempresarios y familias que tienen créditos de vivienda.
La iniciativa busca ofrecer un respiro a quienes han acumulado deudas con el fisco en medio de la crisis económica. El ministro de Economía, Gabriel Espinoza, explicó en declaraciones a la red estatal que “todas las deudas tributarias hasta el 31 de octubre de 2025 van a ser perdonadas en sus multas e intereses. Los deudores podrán ponerse al día sin enfrentar penalizaciones”.
Sin embargo, es importante señalar que este beneficio no se aplica a casos que ya cuenten con sentencia ejecutoriada, retenciones no pagadas o delitos tributarios que ya están tipificados bajo la Ley 2492.
Suspensión de embargos
La Ley 1670 también suspende temporalmente los embargos y permite el diferimiento de cuotas para Créditos de Vivienda de Interés Social, así como para Unidades económicas de tamaño Micro y Pequeña (MyPEs). Para poder acogerse a este beneficio, los prestatarios que se encuentren en mora no deben tener procesos judiciales iniciados a la fecha de promulgación del decreto.
Durante el periodo que dure el diferimiento, el capital que se postergue generará intereses corrientes. Estos intereses se cobrarán junto con el monto principal una vez que el cliente retome sus pagos regulares.
Respuesta a movilizaciones
El Decreto Supremo 5503 surge como una respuesta directa a las amenazas de movilizaciones de diversos sectores productivos. Estos sectores exigían una pausa en sus obligaciones bancarias para poder reactivar su economía. Según el documento oficial, los objetivos centrales de esta medida son proteger al consumidor financiero y evitar el sobreendeudamiento.
Además, se busca reducir el deterioro de la cartera de los bancos y asegurar la solvencia del sistema financiero nacional frente a una posible escalada inflacionaria.
Condiciones de los beneficiarios
Los beneficiarios de esta medida han reiterado que no se trata de una condonación de la deuda total. Más bien, es un “tiempo de espera” necesario para que puedan generar ingresos antes de cumplir con sus compromisos financieros.
