La Federación Departamental de Juntas Vecinales de Chuquisaca (Fedjuve) ha decidido romper el silencio tras llevar a cabo una asamblea de emergencia que reunió a los seis distritos de la capital. En esta reunión, la organización expresó su rechazo oficial al Decreto Supremo 5503, que elimina la subvención a los combustibles. Argumentan que este cambio provocará un aumento inmediato en los precios del transporte, lo que impactará directamente en el costo de los alimentos y afectará a las familias más vulnerables.
Demandas de la Fedjuve
La dirigencia vecinal fue clara al afirmar que el sacrificio no debe recaer únicamente en los ciudadanos. En su resolución, exigen que el Gobierno de Rodrigo Paz implemente de inmediato una política de austeridad estatal. Esta demanda incluye un recorte del 30% en los salarios de los altos mandos de los niveles central, departamental y municipal.
Además, la Fedjuve exige que el Estado garantice el abastecimiento de productos básicos como carne, arroz y azúcar a precios regulados, aprovechando que estos son de producción nacional. La preocupación por el impacto en la economía familiar ha llevado a la organización a tomar una postura firme en defensa de los intereses de la población.
Defensa del Gobierno
Desde la sede de Gobierno, los ministros de Economía e Hidrocarburos han defendido la norma, calificándola como una medida de “emergencia económica y social”. El ministro José Gabriel Espinoza argumentó que el sistema anterior era insostenible, ya que cerca de 1.000 millones de dólares destinados a la subvención se filtraban anualmente hacia el contrabando y redes de corrupción.
El Ejecutivo sostiene que, aunque el ajuste es sensible, ha logrado estabilizar el tipo de cambio, reduciendo el dólar de Bs 14 a Bs 10. Esta medida busca equilibrar la economía nacional y evitar mayores problemas financieros en el futuro.
Reacciones a la preocupación ciudadana
El Gobierno ha desestimado los temores de un desabastecimiento masivo, calificando la preocupación de la ciudadanía como una “psicosis colectiva” alimentada por desinformación. “No va a faltar aceite, pollo ni huevo”, aseguró Espinoza, enfatizando que el costo del transporte solo representa un 7% del precio final de los productos. Por lo tanto, no habría justificación técnica para incrementos desmedidos en los mercados.
Blindaje del Banco Central
Un aspecto clave del Decreto 5503 es el blindaje del Banco Central de Bolivia (BCB). El ministro Espinoza fue contundente al prohibir que el ente emisor continúe financiando a las empresas públicas deficitarias. Según él, esta práctica de “financiar el malgasto” fue la principal causa del deterioro de las Reservas Internacionales Netas (RIN) y de la pérdida de credibilidad de la moneda nacional.
Reactivación de la industria nacional
En el ámbito técnico, el ministro de Hidrocarburos, Mauricio Medinaceli, explicó que el decreto también busca reactivar la industria nacional mediante la importación de petróleo crudo. Actualmente, las refinerías bolivianas operan a un 30% de su capacidad, y el objetivo es elevar esta cifra al 90% para 2028.
Este plan se complementará con un nuevo paquete de leyes para los sectores de litio, electricidad y energías verdes, con el fin de atraer inversión privada y revertir la caída histórica en la producción de hidrocarburos. La estrategia del Gobierno busca no solo estabilizar la economía, sino también fomentar el crecimiento sostenible en el país.













