La Federación Departamental de Choferes “1 de Mayo” de La Paz ha decidido, en un ampliado de emergencia, llevar a cabo un paro de 24 horas con bloqueo de vías este viernes 19 de diciembre.
Esta medida busca la abrogación inmediata del Decreto Supremo 5503, que eliminó la subvención a los hidrocarburos. Como resultado, el precio de la gasolina se ha elevado a Bs 6,96 y el diésel a Bs 9,80. El dirigente Edson Valdez ha advertido que, si no son escuchados, comenzarán un paro indefinido a partir del lunes 22 de diciembre.
Movilizaciones y huelga de hambre
La movilización no solo implicará la suspensión de servicios, sino que también incluirá la instalación de una huelga de hambre por parte de los principales dirigentes del sector.
Además, en el ampliado se determinó la implementación de lo que han denominado “tarifas revolucionarias” en todas las modalidades de transporte dentro del departamento. Según Valdez, estas tarifas tienen como objetivo compensar el incremento de los carburantes, que, según denuncian, “asfixia” la economía de las familias de los transportistas.

Ruptura en el gremio
Este conflicto ha generado una ruptura total dentro del gremio a nivel nacional. La dirigencia paceña ha anunciado que no participará en el ampliado nacional convocado por la Confederación en Cochabamba, marcando así una clara distancia de su ente matriz.
Durante la reunión, las bases lanzaron críticas contundentes contra su máximo ejecutivo nacional, Lucio Gómez, a quien calificaron de “traidor” por su supuesta falta de firmeza frente a las medidas económicas del gobierno de Rodrigo Paz.
Protestas en la sede de Gobierno
Finalmente, los transportistas han asegurado que las calles de la sede de Gobierno serán el escenario principal de sus protestas hasta que el Ejecutivo retroceda en la medida.
Esta decisión profundiza la crisis interna del transporte y pone en jaque la movilidad en el departamento, en un contexto de alta tensión social tras la implementación de la política de emergencia económica del Gobierno.













