Las fuerzas de seguridad de la India llevaron a cabo cargas policiales este sábado en Calcuta, en respuesta a disturbios que estallaron entre grupos de aficionados. La causa de la agitación fue la breve visita del futbolista Lionel Messi, quien solo estuvo 22 minutos en el estadio, lo que muchos asistentes calificaron como una “estafa”.
La policía utilizó bastones (lathicharge) en las cercanías del hotel Hyatt, donde se hospedaba la estrella argentina. Esto fue necesario para dispersar a cientos de seguidores enfurecidos que se reunieron después del evento para expresar su descontento con los organizadores del “GOAT Tour”.
Expectativas frustradas en el estadio
El estallido de violencia en las calles fue el resultado de una jornada caótica que comenzó en el Salt Lake Stadium. Allí, miles de personas que pagaron entradas de hasta 10,000 rupias (más de 100 dólares) vieron cómo sus expectativas se frustraban cuando Messi fue evacuado de manera apresurada.
El astro del fútbol permaneció en el campo solo 22 minutos. Durante su breve estancia, fue rodeado rápidamente por un denso cordón de políticos locales, funcionarios y agentes de policía, quienes buscaban tomarse fotografías con él. Este bloqueo visual impidió que la multitud en las gradas pudiera ver al jugador.
Reacciones de los aficionados
La frustración de los aficionados llevó al lanzamiento de sillas, botellas de plástico y a destrozos del mobiliario del estadio. Esto obligó al equipo de seguridad personal de Messi a activar el protocolo de extracción y cancelar cualquier interacción con el público.
Los aficionados denunciaron la situación como un fraude comercial. Un seguidor comentó a los medios locales que el evento fue una estafa, ya que gastaron mucho dinero y ni siquiera pudieron ver a Messi.
Otro asistente explicó que la culpa recayó en la gestión del evento. Según él, la policía y los militares estaban más ocupados tomándose fotos que controlando la situación, lo que dejó a los fans sin espectáculo.
Desplazamiento hacia Hyderabad
Tras los incidentes en el estadio y las cargas policiales en el hotel, la comitiva del jugador se dirigió al aeropuerto. Desde allí, volaron hacia la ciudad de Hyderabad, que es la siguiente etapa de su gira por la India, dejando atrás “la ciudad de la alegría” marcada por la polémica.
