Un juzgado ha dictado este miércoles la medida de detención domiciliaria para tres comunarios que están implicados en el violento enfrentamiento ocurrido el pasado lunes en el botadero de Cotapachi, Cochabamba. Este incidente dejó como resultado dos personas fallecidas y 16 heridos.
Mientras la justicia avanza en este caso, el Gobierno, a través del Ministerio de Gobierno, ha lanzado denuncias sobre la organización de los bloqueadores. El ministro de Gobierno, Marco Antonio Oviedo, afirmó que los comunarios que se enfrentaron a la Policía estaban “organizados” y contaban con financiamiento, drones y aparatos explosivos, lo que demuestra una “evidente planificación”.
Las autoridades gubernamentales sostienen que el conflicto se intensificó debido a la preparación de los movilizados. El viceministro René Calla denunció que se utilizaron petardos con dinamita, los cuales fueron calificados como “morteros artesanales”. Además, mencionó que los policías fueron disparados, perseguidos por kilómetros y despojados de equipos, armamento y teléfonos celulares.
Equipamiento de los comunarios
El ministro Oviedo señaló que estos grupos contaban con “drones, explosivos, vehículos y dinero”, lo que indica que no fue un hecho “casual”. Calla no descartó la posibilidad de que los grupos organizados en torno a la toma de tierras por el vertedero tengan vínculos con organizaciones afines al expresidente Evo Morales.
Investigaciones en curso
La Fiscalía de Cochabamba ha abierto tres investigaciones principales relacionadas con el enfrentamiento. Este conflicto ocurrió cuando un contingente policial intervino en el bloqueo que los comunarios mantenían por 12 días debido a un conflicto de límites.
En la actualidad, hay nueve personas aprehendidas, de las cuales ocho son comunarios y un es un policía. Las investigaciones se centran en homicidio, debido a las dos muertes, así como en lesiones graves y gravísimas, e instigación a delinquir.
Delitos en investigación
El fiscal Osvaldo Tejerina añadió que también se están investigando los delitos de porte y portación de armas, asociación delictuosa y asociación criminal. El efectivo policial aprehendido está siendo investigado por presunto homicidio, mientras que los comunarios son sindicados por los otros delitos mencionados.














