La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) ha inhabilitado un total de 6.398 tarjetas B-Sisa debido a irregularidades detectadas en la documentación y en los volúmenes de carga de combustible que resultan injustificables. Esta acción representa un ahorro mensual de 50.000.000 bolivianos.
La directora de la ANH, Margot Ayala, comunicó estos hallazgos tras realizar una revisión que se llevó a cabo después de varios años sin controles adecuados.
Ayala mencionó que se encontraron casos de carnets “inexistentes”, que fueron utilizados para tramitar las tarjetas. “Hemos encontrado que hay carnets de identidad que no le pertenecen a nadie, porque ni siquiera tienen una numeración general. Entonces son irregularidades que se pueden identificar a simple vista”, explicó.
Incrementos injustificables
En relación a los volúmenes de combustible, se han detectado incrementos exponenciales de hasta 500% en el carguío, lo cual no tiene justificación. La funcionaria aclaró que cualquier persona que se sienta perjudicada por esta medida puede seguir los conductos regulares y demostrar el incremento de su consumo.
Las 6.398 tarjetas inhabilitadas representan un total de 4,5 millones de litros de combustible al mes, y su cancelación implica un ahorro significativo para el país.
Resultados de la revisión
Ayala enfatizó que estos resultados son producto de una primera revisión, basada en criterios lógicos. “Durante los últimos 10 años, nadie se ha dedicado a hacer este control a través de denuncias y de análisis de los datos que teníamos. Hemos tomado conocimiento de que estas tarjetas se han distribuido de forma indiscriminada”, manifestó.
Distribución de tarjetas B-Sisa
Desde diciembre de 2015, se han distribuido más de 29.000 tarjetas B-Sisa para el consumo agropecuario. Además, Ayala hizo un llamado a la conciencia de quienes poseen estas tarjetas, indicando que su consumo real podría ser de 200 litros, mientras que su autorización es para 1.200 litros, lo que les permite adquirir un volumen mayor para revender.
La directora advirtió que esta práctica es un delito y debe ser evitada.














