El narcotraficante uruguayo Sebastián Marset ha vuelto a la escena pública tras un tiempo en la clandestinidad. En una reciente entrevista con un medio de comunicación paraguayo, lanzó graves acusaciones que involucran a la élite institucional en el crimen organizado.
Marset declaró que el crecimiento del narcotráfico en Paraguay es posible “gracias también a autoridades, policías, Gobierno y mucha mafia está metida.”
Este narcotraficante, que enfrenta una orden de captura internacional, explicó que su decisión de no entregarse a la justicia paraguaya se basa en la falta de garantías y en su temor a enfrentar lo que él llama la “injusticia paraguaya.”
La operación A Ultranza
Durante la entrevista, Marset se refirió a la Operación A Ultranza, que es considerada la investigación de narcotráfico más grande en la historia de Paraguay. Afirmó que no existe “ni una sola prueba” en su contra.
“Vamos a hablar de A Ultranza, la operación más grande de la historia del Paraguay, y no tienen una prueba, no incautaron un kilo de droga, 0 no incautaron nada,” enfatizó, argumentando que por esta razón no tiene procesos en su contra ni pedidos de captura en países europeos como Francia o Bélgica.
Denuncias a funcionarios
Marset también reveló que envió una carta a las autoridades en la que acusaba a funcionarios vinculados al narcotráfico. Sin embargo, afirmó que el asunto no avanzó tras una prueba de polígrafo. “Como es de parte del Gobierno, de la Policía no se quieren ensuciar y se olvidaron del tema,” expresó.
Situación de su esposa
La reaparición de Marset se produjo pocas horas después de que su esposa, Gianina García Troche, quien se encuentra en detención preventiva en Paraguay, fuera sancionada por presunta indisciplina en la cárcel.
Desconfianza en el sistema judicial
Marset hizo una clara distinción entre su situación y la de los funcionarios públicos. “Los delincuentes somos nosotros; los que están ahí de camisita y corbata del otro lado no lo son,” afirmó, responsabilizando a sectores institucionales por la situación del narcotráfico.
Finalmente, Sebastián concluyó su declaración reiterando su desconfianza en el sistema judicial. “Me pueden buscar toda la vida, pero si me encuentran, ya sé a lo que me voy a enfrentar: a la injusticia paraguaya.”














