La situación en el municipio de Colcapirhua se torna cada vez más crítica debido al cierre del botadero de basura, que lleva ya siete días sin operar. La mañana de este jueves 4 de diciembre, funcionarios ediles intentaron desbloquear el acceso al vertedero, pero la acción derivó en un enfrentamiento con vecinos movilizados, dejando un saldo de 11 personas heridas y varios vehículos del Estado dañados.
Según el alcalde de Colcapirhua, Nelson Gallinete, los involucrados serían empleados municipales que se encontraban cumpliendo con su tarea de recolectar la basura.
El conflicto comenzó hace una semana, cuando la comunidad decidió cerrar el botadero en protesta por diversas demandas locales, incluyendo la mejora de las condiciones del servicio de recolección y la seguridad del área. Desde entonces, la acumulación de basura en las calles ha aumentado considerablemente, generando un riesgo sanitario y malestar entre los residentes, que denuncian olores desagradables, proliferación de insectos y afectación a la vida cotidiana.

Autoridades municipales señalaron que se trató de un intento de mediar con los vecinos y reabrir el vertedero para evitar que la basura se siga acumulando, pero admitieron que el choque dejó daños materiales y personales. Por su parte, los vecinos aseguran que mantendrán el bloqueo hasta que sus demandas sean atendidas, y exigen la presencia de autoridades superiores para encontrar una solución definitiva al conflicto.
Mientras tanto, la situación en las calles de Colcapirhua se torna insostenible. Los ciudadanos reclaman acciones inmediatas para controlar la basura acumulada y prevenir posibles problemas de salud pública. Organizaciones comunitarias ya anunciaron que continuarán movilizándose hasta que se establezca un acuerdo con el municipio que garantice tanto el funcionamiento seguro del botadero como la atención de las demandas vecinales.














