El Ministerio de Finanzas Públicas ha comunicado al Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO) que el techo presupuestario para la gestión 2026 será de aproximadamente 500 millones de bolivianos, según lo informado por el vocero Jaime Gonzales.
Disminución en ingresos esperada
El GAMO ha anticipado que habrá una reducción en la coparticipación tributaria y en el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), lo que podría impactar negativamente en el presupuesto municipal.
Gonzales subrayó que tanto la coparticipación tributaria como el IDH son esenciales para el presupuesto municipal. Sin embargo, también advirtió que se prevé una disminución en estos ingresos para la próxima gestión.
“Si este año hemos tenido una disminución entre la coparticipación tributaria y el IDH de aproximadamente 70 millones, parece que para la próxima gestión del 2026 vamos a tener inclusive un poco más de recorte en este tema”, afirmó.

Medidas para aumentar la recaudación
Ante este panorama, el GAMO está implementando estrategias para incrementar la recaudación y así mitigar el efecto de la reducción en la coparticipación tributaria. “Estamos estableciendo políticas fundamentalmente de recaudación. Esperemos que las proyecciones que nos hemos planteado para la recaudación de esta gestión, que nos va a servir para la próxima gestión también, estemos abordando un monto de aproximadamente más de 220 millones de bolivianos como corresponde”, enfatizó Gonzales.
Proyecciones de presupuesto
Gonzales indicó que si se logran cumplir las proyecciones de recaudación, el presupuesto para la gestión 2026 sería similar al de la gestión 2025, que asciende a aproximadamente 540 millones de bolivianos.
“Si todo eso se cumple, obviamente que vamos a estar casi con el mismo presupuesto de la gestión 2025”, afirmó.
Desafíos para el GAMO
El GAMO se enfrenta a importantes desafíos para mantener un presupuesto estable y asegurar la prestación de servicios a la población. La reducción en la coparticipación tributaria y el IDH representa un reto significativo que requiere políticas efectivas de recaudación y una gestión presupuestaria adecuada.