El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 1 de Quilmes, condenó este lunes a Yesica del Carmen Aquino y Roberto Carlos Fernández, madre y padrastro de León Aquino, un bebé de 18 meses que fue asesinado a golpes, en Berazategui, Buenos Aires.
El crimen de León ocurrió en septiembre del 2021, cuando el menor fue ingresado a un hospital con hematomas en su cuerpo y los médicos radicaron la denuncia. El niño murió días después a causa de una “septicemia traumática” por las lesiones en su cuerpo. También presentaba pinchazos con agujas.
León Aquino vivía con otros cuatro hermanos de entre 8 y 16 años que, de acuerdo a la investigación, también sufrieron torturas. Con anterioridad, los vecinos de la pareja , que vivía en una casa ubicada en la calle 162 al 2600, hicieron una denuncia por los malos tratos que recibían el niño y sus hermanos.

La autopsia fue clave en el caso: reveló que el bebé tenía múltiples lesiones, incluyendo golpes, mordeduras, y lo más impactante, una aguja de tejer de 2,5 cm clavada en la espalda, que le causó una hemorragia y una infección generalizada que le provocó la muerte, reveló el portal TN en un extenso reportaje.
El 19 de septiembre del 2021, el día en que murió León, las hermanas de Yesica, según declararon en el juicio-, dijeron que puso música a niveles elevados. Cuando la madre y el padrastro llamaron a la ambulancia, aseguraron que se había ahogado con leche.
Sin embargo, la Justicia determinó que Fernández le dio su mamadera a León pero que luego lo tapó con frazadas y almohadas hasta que dejó de llorar.

Los testimonios de los hermanos del niño describieron un escenario de maltrato constante. Según los testigos, le daban golpizas a mano abierta o con palos, mordían en el cuello, lo bañaban y en pleno invierno lo dejaban desnudo al lado de la ventana para que se congelara, hacían caminos de pan en la cuna para que se llenara de hormigas y lo mordieran, ponían pimienta en la leche de la mamadera o le escupían flema en su interior. le tapaban la cara con las almohadas cuando lloraba. le tiraban agua helada, clavaban alfileres en el paladar y agujas en los pies, le daban huesos de pollo para que le astillaran la garganta.
Este tipo de crímenes plantea interrogantes sobre cómo se pueden prevenir situaciones similares en el futuro. Las autoridades han enfatizado la importancia de crear conciencia sobre el maltrato infantil y fortalecer los mecanismos de denuncia para proteger a los más vulnerables.