El Ejército israelí mató el sábado a al menos 68 palestinos e hirió a otros 346, según el recuento diario del Ministerio de Sanidad publicado hoy. Con este informe, el número total de fallecidos por fuego israelí ha aumentado a 64,871 en casi dos años de ofensiva, sin contar aquellos que han muerto por hambre o que siguen atrapados bajo los escombros.
De acuerdo con los datos del Ministerio de Sanidad, un total de 10 personas fueron asesinadas este sábado mientras esperaban recibir ayuda o la recogían de camiones que ingresan a la Franja con alimentos. Este es un territorio donde la ONU declaró a finales de agosto la existencia de una hambruna en la ciudad de Gaza, y se prevé que esta situación podría extenderse a finales de septiembre hacia otras áreas del enclave.
Sumando estas nuevas 10 muertes, el total de personas asesinadas asciende a 2,494, mientras que aproximadamente 18,000 resultaron heridas al buscar ayuda humanitaria en los puntos de recogida de la polémica Fundación Humanitaria para Gaza (GHF) o en las cercanías de los puntos militares donde pasan los escasos camiones que logran ingresar suministros al enclave gazatí.
Fallecidos por hambre
Además, este sábado el Ministerio de Sanidad registró 2 nuevos muertos por hambre en Gaza, lo que eleva a 422 los fallecidos por esta causa desde octubre de 2023, de los cuales 145 son niños.
Ofensiva militar en Gaza
Desde hace más de un mes, el Ejército israelí ha estado llevando a cabo una ofensiva contra la ciudad de Gaza, que es la capital de la Franja. El objetivo de esta operación es ocupar la ciudad, intentar rescatar a los rehenes israelíes que aún se encuentran allí y acabar con Hamás, lo que ha llevado al desplazamiento de alrededor de un millón de personas que residían en la urbe.
Desde que comenzó esta ofensiva, los bombardeos han aumentado en la capital gazatí, así como las demoliciones y la destrucción de diversas infraestructuras en la zona.