El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció que el país ha logrado mil días sin homicidios desde que comenzó su gestión en 2019. Este mensaje fue compartido el sábado 30 de agosto a través de la red social X. En lugar de realizar una cadena nacional, Bukele optó por invitar a la ciudadanía a reflexionar sobre el camino recorrido hasta este momento.
“Mil días sin homicidios desde el inicio de nuestro gobierno”, escribió Bukele en su publicación. “Me recomendaron hacer una cadena nacional y dar un discurso para conmemorar este hito histórico. Pero creo que en lugar de discursos, lo mejor es que hoy reflexionemos sobre lo que nuestro país ha vivido y sobre todas las fuerzas que intentaron impedir que llegáramos hasta aquí”, añadió el mandatario.
Plan Control Territorial
El gobierno atribuye este registro a la implementación del Plan Control Territorial. Este plan combina el despliegue masivo de policías y militares, así como al régimen de excepción que se instauró en marzo de 2022. Esta medida ha permitido la suspensión de diversas garantías constitucionales y está dirigida a combatir a las pandillas.
Desde la implementación del régimen de excepción, aproximadamente 90,000 personas han sido detenidas, según cifras oficiales. Sin embargo, esta estrategia ha sido objeto de críticas por parte de organismos de derechos humanos, que han denunciado múltiples irregularidades y abusos en el proceso de detención y reclusión masiva.
Estadísticas de homicidios
Durante la gestión de Bukele, El Salvador ha registrado oficialmente 5,688 homicidios y 2,548 desapariciones. Estas cifras han sido divulgadas por el propio presidente. Es importante señalar que las estadísticas del gobierno no incluyen las muertes de pandilleros en enfrentamientos con la Policía, el hallazgo de osamentas ni los casos de supuestos delincuentes abatidos por civiles. Estas categorías sí eran consideradas por administraciones anteriores.
Régimen de excepción vigente
El régimen de excepción cumplió tres años el pasado 27 de marzo de 2025 y sigue vigente en todo el territorio salvadoreño. La situación continúa generando debate y preocupación entre diferentes sectores de la sociedad.