La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) expresó su rechazo este viernes 22 de agosto ante la ocupación violenta de la Mina Reserva-Tres Amigos, que es administrada por el Grupo Minero Sinchi Wayra, ubicada en Potosí. Este pronunciamiento se da tras el ingreso ilícito de grupos vinculados a cooperativas mineras en las áreas de trabajo, lo que ha generado alarma tanto en la empresa como en la comunidad local.
En su declaración, la organización empresarial indicó que estos actos vulneran derechos constitucionales, afectan la seguridad jurídica y deterioran la confianza de los inversionistas en el país. Por esta razón, la CEPB exigió al gobierno nacional que garantice la protección de los trabajadores y sus familias, resguarde la propiedad privada, restablezca el orden legal, desalojar a los invasores y sancione a los responsables de estos hechos.
Implicaciones de la ocupación
Además, la confederación advirtió que la repetición de este tipo de ocupaciones, tanto en áreas mineras como agrícolas, fomenta la impunidad y debilita la institucionalidad. Esto representa una amenaza para la libre iniciativa empresarial, que es un pilar fundamental para el desarrollo económico y la estabilidad del Estado de derecho.
Detalles de la ocupación
En la madrugada del jueves, más de 800 integrantes de cooperativas mineras ingresaron de manera agresiva a la concesión de Sinchi Wayra, portando dinamitas. La acción comenzó en el sector de La K’asa y se extendió hasta la comunidad de Jayaquila. Durante la toma, los invasores detonaron explosivos e incendiaron pastizales, mientras que los trabajadores sindicalizados mantenían la vigilancia y resguardaban pacíficamente las instalaciones.
Solicitud de intervención
La empresa alertó sobre el riesgo de enfrentamientos y solicitó a las autoridades que intervinieran de inmediato para proteger a los trabajadores, garantizar la paz en la zona y asegurar el respeto a la propiedad privada y a la normativa vigente.
LDVY