La Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) ha acusado al régimen de Nicolás Maduro de colaborar con guerrillas colombianas para enviar cocaína a carteles mexicanos. Esta acusación surge en un contexto donde se ha registrado un aumento en las incautaciones de drogas en Venezuela. Durante una entrevista el 21 de agosto de 2025, el director de la DEA, Terry Cole, afirmó que Venezuela se ha convertido en un estado narcoterrorista.
En la misma entrevista, Cole declaró que “Venezuela se ha convertido en un estado narcoterrorista que sigue colaborando con las FARC y el ELN de Colombia para enviar cantidades récord de cocaína desde Venezuela a los carteles mexicanos, que siguen entrando a Estados Unidos”. Además, mencionó que en lo que va de 2025 se han incautado más cocaína que en años anteriores y advirtió que la cantidad de metanfetamina y fentanilo que entra al país sigue en aumento.
Respuesta de Estados Unidos
Las acusaciones contra el régimen venezolano se producen después de que la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmara que Washington está preparado para “usar todo su poder” para frenar el “flujo de drogas hacia su país”. Leavitt calificó al régimen como “un cartel del narcotráfico” y acusó a Maduro de liderar la organización conocida como Cartel de los Soles.
Este jueves, Estados Unidos ordenó el despliegue de un escuadrón anfibio hacia el sur del Caribe. Esta decisión forma parte de los esfuerzos del presidente Donald Trump para enfrentar las amenazas provenientes de cárteles latinoamericanos. Los buques USS San Antonio, USS Iowa y USS Fort Lauderdale podrían situarse frente a las costas de Venezuela a partir del domingo. En total, estos buques transportan a 4,500 efectivos, entre ellos 2,200 marines.

Objetivos de la operación militar
El viernes pasado, CNN reportó que la operación militar tiene como objetivo combatir a los cárteles y reforzar la presencia estadounidense en zonas clave del tráfico ilegal hacia su territorio. La Administración Trump ha dejado claro su compromiso de utilizar todos los recursos militares disponibles para frenar la entrada masiva de drogas en el país.
En apoyo a estas operaciones, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, emitió una carta donde se redefine el alcance tradicional del Ejército estadounidense. El documento especifica que estas competencias incluyen sellar fronteras y combatir actividades criminales como el tráfico de drogas.
Aumento de las acusaciones
En las últimas semanas, Washington ha intensificado sus acusaciones contra Maduro. Según la Fiscalía estadounidense y la DEA, se han incautado 30 toneladas de cocaína que supuestamente están ligadas a Maduro, además de 7 toneladas que están vinculadas directamente al mandatario venezolano. También, las autoridades estadounidenses han confiscado activos valorados en más de 700 millones de dólares.
A comienzos de este mes, el gobierno estadounidense aumentó a 50 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a la detención de Maduro. Este despliegue militar y las denuncias han generado un contexto tenso entre Estados Unidos y Venezuela, lo que afecta la cooperación regional y la estabilidad del Caribe.

Reacción de Caracas
Caracas ha respondido asegurando que las “amenazas” revelan la “falta de credibilidad” de Estados Unidos y ponen en riesgo la “paz y estabilidad” regional. Además, países como Cuba, Bolivia, Nicaragua y Colombia han condenado la presencia naval estadounidense en el Caribe.