Únicamente 336 migrantes se encuentran actualmente en el centro de detención “Alligator Alcatraz”, ubicado en el sur de Florida. Esta información fue compartida por el congresista estadounidense Maxwell Frost el jueves 21 de agosto de 2025. Además, una juez está evaluando la posible clausura de este lugar tras una demanda presentada por grupos ambientalistas.
Disminución de migrantes
Frost, quien representa a Orlando como legislador demócrata, indicó que la cifra actual de migrantes representa aproximadamente un tercio de los que había en su visita anterior. Según la División de Gestión de Emergencias de Florida (DEM), el mes pasado la instalación tenía capacidad para 2.000 personas y se proyectaba que podría llegar a albergar hasta 4.000.
“Solo hay 336 personas en este momento. La última vez que vine había casi 1.000. Tan solo unos días antes, escuchamos que el número era 405”, explicó Frost, haciendo hincapié en la disminución progresiva de internos en el centro.
Posible cierre del centro
La jueza Kathleen Williams, del Distrito Sur de Florida, ha establecido este jueves como plazo para decidir si ordena el cierre de la instalación. Esta medida responde a una demanda presentada por Friends of The Everglades, Center for Biological Diversity y la tribu Miccosukee. Estos grupos denuncian daños ambientales en los Everglades, un hábitat que alberga especies protegidas como caimanes, víboras y panteras.
El 7 de agosto de 2025, Williams suspendió temporalmente los trabajos de infraestructura, pavimentación y cercado en la instalación. Esta medida se mantendrá hasta que se resuelva el conflicto, con el objetivo de prevenir mayores impactos en la zona natural.
Apertura de nuevo centro
Por su parte, el gobernador Ron DeSantis anunció la apertura de un nuevo centro de detención llamado “Deportation Depot”. Este nuevo sitio, ubicado en una cárcel abandonada del norte del estado, tendrá capacidad para más de 1.300 personas y servirá como alternativa para descongestionar “Alligator Alcatraz”.
Condiciones en el centro
A pesar de la disminución en el número de internos, Frost denunció que “aún hay jaulas y condiciones horribles”. También criticó que no se le permitió hablar con los migrantes, quienes fueron trasladados sin informar su destino, lo que complica la supervisión de la situación.
“Pensé que, porque hay muchas menos personas aquí, tal vez distribuirían a la gente a lo largo de las jaulas para no poner a 32 personas en una sola. No es el caso. Aún hay 32 personas por jaula, y simplemente estoy muy perturbado por el hecho de que no pude ver a los hombres que vine a ver”, concluyó el congresista, enfatizando la precariedad de las condiciones en el centro de detención.
LDVY